TEHUANTEPEC, Oaxaca.- Madres de familia piden al IEEPO poner atención al acoso en las escuelas. Indicaron que la violencia escolar va desde un insulto, una burla o un apodo y es una práctica que lastima el autoestima de los estudiantes.
El acoso escolar es un tema que muchas veces no es considerado como prioridad por los directivos de las escuelas, incluso, también entre padres de familia, debido a que los menores de edad que padecen alguna situación de esta naturaleza, deciden no hablar por miedo al qué dirán o por la sanción al que pueden estar sujetos.
El bullying es una práctica común, la persona que lo ejerce impone su dominio sobre otra persona, situación que conduce a la violencia. Poco a poco este tema ha acaparado la atención de padres de familias y de docentes, pero no hay datos estadísticos debido a que se maneja de manera personal, y en muchos casos, son temas aislados.
Ante un reciente caso de acoso escolar entre dos niñas en el COBAO plantel 60 de San Blas Atempa, cuyo video se hizo viral en cuestión de minutos, “creo que las autoridades educativas deben poner mayor atención en el bullying, aunque muchas veces no lo vemos, puede que en algunas escuelas persista el acoso", considera Fernanda Sánchez, madre de familia.
De acuerdo con el video grabado en dos partes, una alumna con el uniforme del Cobao de San Blas se burla de otra persona, no se sabe si es compañera o no, lleva puesta una ropa casual. De las palabras trascienden a los golpes. La dirección de la escuela no se ha pronunciado al respecto.
"Es un tema que debe tener toda la atención, es necesario hacer algo para poder frenar el acoso en las escuelas y que solo afecta a nuestros hijos", expresó la madre de familia.
Dijo que las escuelas deben ser siempre un espacio seguro para sus hijos. Sin embargo, para muchos alumnos, la escuela se ha convertido en la fuente de un tipo de violencia del que son víctimas, y si no pone mayor énfasis en el problema, podría salir de control.
Para Teresa Luis, madre de familia y maestra de una escuela primaria en Tehuantepec, el acoso también se da en el plantel donde ella imparte clases, y la raíz viene desde la familia. Cuesta mucho platicar con los padres de familia, pues no aceptan que el problema lo traen de casa, indicó a través de redes sociales.
Precisó que, aunque los maestros vigilen a los alumnos, son los padres los responsables de los valores que se inculcan a los jóvenes.
