TEHUANTEPEC, Oaxaca.- "Vivimos en la era de las comunicaciones, donde el celular, las redes sociales o el internet son indispensables para el desarrollo de nuestras actividades, pero también nos alejan cada vez más de la familia", afirmó el obispo de la Diócesis de Tehuantepec, Óscar Armando Campos Contreras.
El líder espiritual de los católicos istmeños dijo que no es raro observar a una familia reunida en su hogar, pero más que unidos sus integrantes están sentados juntos, pero con la mente en otro lugar.
En vez de conversar entre ellos, cada uno está sumido en su propio mundo a través de sus dispositivos electrónicos, afirmó el obispo durante su homilía con motivo del Día de la Familia que celebró este primer domingo de marzo en todo el país.
El jerarca de la Iglesia católica dijo que en una sociedad cada vez con mayor tecnología, pareciera que la comunicación únicamente se da a través del teléfono, mediante el chat.
Se van perdiendo la relación personal y los valores de la familia, pues aunque sus integrantes vivan en el mismo techo no se hablan ni se conocen bien.
En este sentido, Óscar Campos recomendó a los padres de familia cuidar que las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías no se vuelvan fuertes desventajas.
Hay que sentarse a la mesa con disposición para la convivencia, platicar con los hijos y conocer el ambiente interior de la familia, recomendó.
Recordó que la familia es el espacio ideal para orientar a los hijos y no se deben permitir agentes externos que sólo nos aíslan de la convivencia en el seno familiar.
Hay que cuidar los espacios y generar las condiciones para que la familia crezca en armonía para que pueda formar personas positivas y productivas.
Recalcó la necesidad de cuidar que los valores de respeto se trasmitan desde el ambiente familiar, porque cuando vemos personas desorientadas es porque suponemos vienen de una familia desintegrada o donde no supieron transmitirles esos valores, manifestó el obispo de Tehuantepec.
Óscar Campos subrayó que la familia es una institución importante que debe cuidarse, porque de no ser así, su mal funcionamiento traerá como consecuencia el deterioro de las personas y de la sociedad.
Resaltó que se deben cuidar la integración familiar y diálogo entre esposos, para fortalecer la vida de los hijos desde antes de nacer y hasta que se vuelvan autónomos y formen su propio hogar.
Y aún después, las relaciones familiares deben continuar, por eso es muy importante el diálogo entre padres e hijos.
"La familia es el espacio ideal para orientar a los hijos y no se debe permitir que agentes externos aíslen y dañen la convivencia":
Óscar Campos Contreras, obispo de Tehuantepec
