TUXTEPEC, Oaxaca.- Aunque existe un llamado para que en la medida de lo posible, las personas guarden cuarentena y en las actividades necesarias a realizar fuera de casa se tomen medidas como la sana distancia, afuera de los bancos de Tuxtepec se observa constantemente la aglomeración de personas, quienes ante la necesidad deben acudir a realizar pagos y cobros.
Desde temprano se observan largas filas de personas que a pesar de la insistencia de elementos de seguridad y personal de salud municipal, se mantienen a casi dos pasos de distancia una de la otra, mientras algunas se juntan aún más para platicar.
Mientras tanto, el personal de los bancos permanece vigilante en las puertas, donde en algunos casos se mantiene cerrada para evitar que más de 15 0 20 personas ingresen al lugar.
Las instrucciones del personal es claro: cobros son a partir de ocho y media de la mañana; los asistentes deben hacer una fila.
La atención se divide en tres filas; los clientes del banco, quienes realizarán algún movimiento en cajero y quienes realizarán un cobro de gobierno; el personal únicamente vigila que dentro del lugar todos guarden un metro de distancia; sin embargo, este protocolo poco sirve, ya que durante el tiempo de espera todos se mantienen aglomerados en la banqueta, bajo el sol, incluso sin cubrebocas o gel antibacterial.
Doña Lilia Ortega asegura que la necesidad de acudir a estos lugares es grande y las medidas a tomar simples; sin embargo, insiste en que la mayoría no respeta las indicaciones, por lo que están conscientes del riesgo que representa.
"Ellos nos dan la indicación de que tenemos que estar a metro y medio de distancia, pero la gente no respeta; pienso que el banco sí toma sus medidas, pero acá fuera no es posible, porque estamos en la calle y pega el sol, todos buscan la sombra", afirma.
Don Ramón Velázquez asegura que el tiempo promedio de espera es de una hora y media a dos horas, ya que pese a la situación, los bancos no se dan abasto.
Abel Jiménez, director de salud municipal, destacó que diariamente realiza el personal a su cargo una labor de concientización; sin embargo, son pocas las personas que las atienden.
El personal les aplica gel antibacterial, les proporciona cubrebocas y les señala la distancia que debe existir entre cada persona; sin embargo, las medidas tienen poco resultado.
