ISTMO DE TEHUANTEPEC.- Porque en los censos que levantó la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) no están todos los que son damnificados, ni son todos los que están, los integrantes de la Coordinadora General de Damnificados del Istmo solicitó al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, realizar un nuevo censo en todos los municipios afectados por los terremotos del mes de septiembre del 2017 y reclasificar los daños, porque muchos fueron calificados como daño parcial pero su vivienda quedó totalmente destruida.
Además, los afectados solicitaron convoque al actual gobierno federal a que atienda y subsane todas las incidencias relacionadas con el primer censo como son: falta de entrega de tarjetas, dispersión de tarjetas sin saldo o con saldos incompletos, tarjetas clonadas, etcétera, así como que entregue los apoyos derivados del segundo censo realizado por la Sedatu, en la misma cantidad y especie que los otorgados en el primer censo.
CENSOS DEFICIENTES Y AL VAPOR
El dirigente de la coordinadora en Asunción Ixtaltepec, Rey Luis Toledo, comentó que después del 7 de septiembre del 2017 el gobierno federal realizó un primer censo que fue hecho de prisa, con muchas deficiencias y dejó fuera a muchas familias que perdieron completamente sus viviendas, ya que se hizo al vapor.
Añadió que después, el 23 de septiembre, hubo otro nuevo sismo en la región pero no se consideró a los damnificados, “por ello las organizaciones ciudadanas realizamos una serie de movilizaciones y gestiones para realizar un segundo censo; al final, ocho municipios istmeños se integraron en la declaración de emergencia, pero quedaron fuera otros de comunidades como Matías Romero y Unión Hidalgo, donde nosotros hemos contabilizado más de 3 mil damnificados que no aparecen en algún censo”.
Precisó que en el segundo recuento se incorporó a alrededor de 7 mil personas, “pero hemos levantado censos ciudadanos, porque resulta que hay un número significativo que no han sido registrados”.
Luis Toledo subrayó que por eso la petición que se hará llegar al presidente electo de concluir las acciones del primero y segundo censos, “pero también llevar a cabo otro recuento para apoyar a quienes no han recibido apoyos, porque viven en las comunidades más marginadas, y que nosotros calculamos en 10 mil personas entre quienes tienen daños en su vivienda parcial o total y que no cuentan con apoyo oficial”.
El Istmo esta destruido y abandonado, aseguran ciudadanos. FOTO: Mario Jiménez
“Esta situación de los damnificados nos preocupa porque hace meses que el gobierno federal claudicó en la atención a las víctimas, aquí están abandonados los trabajos en escuelas, hospitales, la reconstrucción de casas; además no pueden argumentar que no recibieron recursos porque hubo dinero del Fonden, de los seguros catastróficos, el gobierno estatal tuvo mil 200 millones de pesos en deuda y 200 millones de pesos del Congreso local, pero nadie sabe que se hizo con todo este recurso”.
“SIN INTERMEDIARIOS”
Por su parte, Soid Ruiz López, integrante de la coordinadora en Juchitán, manifestó que es necesario concluir la entrega de apoyos a los damnificados del segundo censo, porque recibieron sus folios, les entregaron un código de barras, “pero no les han entregado hasta ningún apoyo económico, parece una burla”.
Recordó que el Programa Nacional de Reconstrucción que el presidente electo anunció en el Istmo cuenta con una bolsa de 10 mil millones de pesos más para los afectados, “lo que nos dá mucho ánimo porque dijo que el apoyo va a llegar directamente a los damnificados, no va a haber intermediarios, y que se hará un nuevo censo con la participación de la sociedad civil y de los damnificados, lo que impide mano negra en el manejo de esos recursos”.
Expresó que en los 21 municipios que agrupa la coordinadora existe mucha gente, la más afectada, la más pobre, que vive en la zona norte del Istmo que no tiene ningún apoyo. “Ellos han ido a buscar al delegado de la Sedatu en Oaxaca, Elpidio Concha Arellano, pero les dice que los censos ya se cerraron y el que entró bien, los que no, pues ya quedaron afuera”.
Manifestó que el gobierno del estado nada más hizo la finta de que ayudó a los damnificados. “Eso es lo que nos preocupa, porque los funcionarios vinieron a tomarse la foto y se fueron, ahora dicen que hay un avance en la reconstrucción pero no es cierto, si vemos tan solo Juchitán nos damos cuenta que aún hay casas sin reconstruir, escombro tirado, vivimos en medio de la destrucción”.
“SE ROBARON EL EMPLEO TEMPORAL”
El dirigente de la Coordinadora General de Damnificados del Istmo, Miguel Ángel Castillo, destacó que es prioritario apoyar a los damnificados, pero no se puede perder de vista el mal manejo de los recursos públicos por parte de las todavía autoridades federales.
“Desde el primer sismo se habló de muchos recursos del Fonden, donaciones, seguros catastróficos y, lo más grave, es que no se vio en la sociedad este apoyo; lo que se vió fueron las despensas, kits de limpieza, agua, colchonetas, pero hasta eso fue también gracias en parte a las donaciones, pero los recursos del Fonden no se vieron, hasta hoy tenemos problemas de tarjetas sin fondo, de clonación de tarjetas, muchos problemas, ya que el recursos no se transparentó nunca”.
Añadió que por esto solicitaron a los legisladores federales que exijan auditorías a los recursos del Fonden y el gobierno del estado, así como los ayuntamientos que se quedaron con el empleo temporal que le correspondía a la gente. “Muchos gobiernos municipales manejaron el empleo temporal en contubernio con el gobierno del estado y se robaron el dinero de ese programa dejando en el abandono a la gente”.
Afirmó que los censos fueron de pésima calidad porque quienes los realizaron no tenían ninguna calificación para evaluar los daños a las viviendas. “Muchos eran estudiantes de nivel medio superior que fueron reclutados para levantar los censos, pero no tenían ni idea de la forma de evaluar los daños”.
