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Tragedia en Ixtepec; obrero murió sin conocer a su hija

Foto(s): Cortesía
Redacción

CIUDAD IXTEPEC, Oaxaca.- La joven, de 19 años de edad, había acordado con su papá visitar pronto Ciudad Ixtepec; ella reside en Tuxtepec, del otro lado del estado oaxaqueño. Ese sería el primer encuentro entre Chano y su hija, pero él partió al viaje eterno sin poder abrazarla.


José Feliciano Zárate, de 39 años, popularmente conocido en Ixtepec como Chano, perdió la vida el jueves, cuando un derrumbe lo sorprendió a él y a otro de sus compañeros, mientras trabajaban en el tendido de la red de drenaje sanitario en la colonia Nizaluuba.


El viernes se efectuó un humilde velorio, tras el rescate de su cuerpo que quedó sepultado entre toneladas de tierra. En la modesta morada, familiares y vecinos recibieron las condolencias, luego del trágico deceso. Apenas cuatro por cuatro metros mide la vivienda, espacio no suficiente para albergar a quienes acudieron a solidarizarse con el hermano de José Feliciano, su único familiar.


Cruel destino


Este sábado, José Feliciano Zárate fue sepultado en el panteón del Barrio Cheguigo Zapata. Ahí, el rostro de la hija que jamás conoció -por azares del destino-, dio cuenta del dolor y la tristeza.


La joven llegó procedente de la Cuenca del Papaloapan; con apenas 19 años, tuvo que despedirse de un padre al que anhelaba conocer. Ella no quiso revelar su nombre, pero detalló que hace poco pudo entablar contacto con su progenitor. En una de esas charlas, habían acordado conocerse después de tantos años.



Sin embargo, la tragedia ocurrida la tarde del jueves evitó que esto fuera posible, y que tuvieran un feliz encuentro.


Con una foto en sus manos, ella llora su partida y lamenta que el destino les haya negado la oportunidad de conocerse.


"Ni siquiera muerto pude conocerlo; debido al estado en el que se encontraba su cuerpo, tuvimos que velarlo a caja cerrada. Sólo me queda esta foto que es la que me permitió saber cómo era", comentó entre sollozos.


La obra




Los cuerpos de los hombres originarios de Ixtepec y Tequisistlán quedaron sepultados. FOTO: Fernando Santiago

A tres días del fatal accidente, la obra de drenaje sanitario que se realiza en la colonia Nizaluuba se encuentra parada. Elementos policiacos la vigilan.


Hasta el momento, ningún representante de la empresa Atila S.A. de C.V, responsable de los trabajos, ha tenido un acercamiento con los deudos.


Destaca el hecho de que vecinos de la colonia Nizaluuba se organizaron para acudir a la población de Magdalena Tequisistláan, al sepelio del desafortunado joven quien en vida llevara el nombre de Julio Mendoza, de 20 años de edad, también víctima del hecho que el edil ixtepecano, Félix Serrano, calificó el viernes como negligencia de la empresa, tras no haber acatado las medidas dictadas por Protección Civil.