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Guardia del Centurión, tradición tehuana

Foto(s): Cortesía
Ángel Mendoza

TEHUANTEPEC, Oaxaca.- La guardia del centurión en el Jueves Santo es una tradición arraigada que simboliza entre los católicos el objeto de su devoción.


Esta tradición se remonta a la época de la colonia. La iglesia de Laborío y San Sebastián fueron los primeros que empezaron con la Guardia del Centurión, posteriormente, se extendieron a otros barrios, comenta Filiberto Salvador Ortiz, Shuana de la iglesia en 1999.


 




Mujeres velando la cruz. FOTO: Ángel Mendoza

 


Al iniciar la Cuaresma con el miércoles de ceniza, la iglesia realiza cada miércoles y viernes de cada semana el Viacrucis, donde participa el Centurión, que este Viernes Santo termina el pago de su promesa, cuidando a “nuestro padre”.
El centurión sale a las 00:00 del jueves y el viernes se incorpora en “El Encuentro”, nombre que por tradición adoptó el barrio de Laborio en referencia al Viacrucis, ya que en la estación cuatro se da el anhelado encuentro entre Jesús y su madre.


Actualmente hay otras iglesias que celebran El Encuentro, pero tradicionalmente solo eran Laborio, aunque en San Sebastián lo llaman “El Santo Entierro”, refiere el Shuana.


En la noche cuando sale el Centurión de su guardia, se coloca al padre Jesús una cruz, la cual es cuidado por unos angelitos, infantes vestidos completamente de blanco y con sus alas.
Este año el Centurión fue Óscar Márquez Celaya, del barrio Liborio, quien se sumará este viernes al llamado Encuentro y con esto, termina el pago de su manda.
 


Centurión hasta el 2029


Representar el Centurión es un honor para los devotos, a pesar de sus riesgos que este contrae por la vestimenta pesada que utilizan y otros objetos para hacer de ésta una penitencia. El que hace el papel de Centurión se prepara con anticipación un año, tanto en lo físico como económico.
La iglesia tiene Centurión al menos hasta el 2029. Hay padres de familia que apuntaron a sus hijos para ese papel cuando tenían 12 años de edad y que después de 15 o más años cumplen su manda.