SAN MATEO DEL MAR, OAX.- Se ve como un desierto. Por diversas causas, año con año es más lenta la recuperación de las lagunas en territorio de San Mateo del Mar.
La sequía del año pasado, fue devastadora para los cultivos, así también para ecosistemas marinos como en la barra de San Mateo, donde la actividad humana a nivel regional y los cambios climáticos a nivel global, han causado estragos desde hace décadas.
El doctor Raúl Betanzos Molina, investigador de la zona Ikoot, dijo que las tormentas tropicales son las principales proveedoras para las lagunas al interior del municipio de San Mateo.
Sin embargo, el año pasado fue diferente: las lagunas permanecieron secas la mayor parte del tiempo.
De acuerdo con los informes de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el fenómeno de El Niño en el año 2015 generó condiciones extremas de temperatura y baja precipitación, consideradas de las más extremas registradas en los últimos 50 años.
LOS DAÑOS
En ese sentido, el investigador refirió otras causas de la desaparición paulatina de lagunas, como la construcción de la Escollera en Salina Cruz, la cual ha provocado con los años el crecimiento del bordo de la playa, lo cual impide que las aguas sean inyectadas al interior de la tierra y nutra las lagunas.
Felipe Ovidio Salazar, comunero ikoot, dijo que en los últimos 30 años se ha perdido un kilómetro de playa, debido a que la corriente marina que viene del este, choca la Escollera, lo cual provoca remolinos que socaban la playa.
Otra de las lagunas afectadas, quizá de manera más importante es la laguna Kirio la cual se nutría con el los afluentes del rio Tehuantepec, sin embargo se ha secado paulatinamente.
Los ikoots cuentan que en la laguna Kirio los niños aprendían a pescar, y los ancianos no tenían que enfrentar el mar abierto o navegar en las lagunas interiores, ya que esta laguna brindaba el sustento sin mayor esfuerzo.
LOS CAMBIOS
El investigador señaló que los cambios ecológicos que se generan a nivel regional y mundial repercuten de manera importante en estos ecosistemas marinos y de manera colateral, con la cultura de los pueblos que viven de la pesca, la cual desde hace 30 años ha venido disminuyendo gradualmente.
“La protección de manglares debe ser prioritaria para mantener el equilibrio ecológico en la zona”, ya que se trata de un solo cuerpo, el cual si es afectado en una parte repercute de manera general en todo el organismo. Lo mismo si continúa la tala inmoderada en la sierra: las lagunas serán las primeras en lanzar una voz de alerta.
