JUCHITÁN, Oaxaca.- Una nueva fuga de amoniaco fue denunciada este miércoles por pobladores de la comunidad de Donají, municipio de Matías Romero, asegurando que el letal gas volvió a fugarse en el mismo lugar donde se registró el pasado 9 de diciembre.
A temprana hora, algunos pobladores se trasladaron al punto donde se había reportado la primera fuga y pudieron constatar nuevamente que el amoniaco volvió a fugarse, provocando que en la zona comenzara a propagarse el fuerte olor.
“Estamos a un lado de la fuga, arriesgando la vida […] en donde decía Pemex que ya había arreglado”, se oye una voz en un video grabado justamente en donde se registró la nueva fuga.
Ante esta situación, volvieron hacer un llamado a las instancias federales y estatales para que se instale una mesa de diálogo, donde se alcancen acuerdos que los lleven a ponerle fin a este problema.
Insisten en que Petróleos Mexicanos (Pemex) selle completamente la fuga y que contemplen el cambio de la tubería que les garantice que ya no habrá riesgos para los residentes de ese lugar.
Luego de la denuncia de los pobladores, el agente municipal de Donají, Rafael Castillejos Fuentes, a través de su cuenta oficial de Facebook, informó que derivado de los reportes con respecto al olor amoniaco, esa autoridad municipal sostuvo una plática, vía telefónica, con personal de Pemex para informarle lo sucedido.
Detalló que este olor a amoniaco, se debió a los trabajos de sellado del ducto que se realizó el día martes, con un desfogue controlado y debido a que el gas se impregna en la superficie, “con la temperatura que hay el día de hoy se siente ligero aroma”.
Retienen a edil y a personal de PemexDurante la tarde este este mismo miércoles, personal de Pemex, un representante de la Secretaría de Gobierno, la presidenta municipal de Matías Romero, Obdulia García López y el agente de Donají fueron retenidos por los pobladores, cuando habían acudido a la población para dialogar con las familias afectadas.
Dijeron que esta acción fue en respuesta a los engaños de las autoridades, pues han transcurrido casi 20 días desde que se dio la primera fuga de amoniaco, y aún se sigue sintiendo el fuerte olor en la comunidad, que los mantiene viviendo en la incertidumbre.
