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Conmemoran católicos Miércoles de Ceniza en Tehuantepec, Oaxaca

Foto(s): Cortesía
Ángel Mendoza

TEHUANTEPEC, Oaxaca.- Con este Miércoles de Ceniza, dio inicio el primer día de la Cuaresma. Devotos católicos abarrotaron las iglesias locales en cumplimiento a esta arraigada tradición.


La imposición de la ceniza sobre la cabeza, representa para los feligreses un gesto de conversión continua. Es así como inicia la Cuaresma, los 40 días de preparación para la Pascua, que culminará con el Domingo de Ramos.


De acuerdo con el calendario católico, el Miércoles de Ceniza marca para la Iglesia el comienzo de una época de reflexión y arrepentimiento por los pecados cometidos, en la que los fieles hacen sacrificios o penitencias que, de acuerdo con sus creencias, renuevan su fe y los acercan más a Dios.


"Polvo eres...


El símbolo de la ceniza es para recordar al católico la máxima que dice: "polvo eres y en polvo te convertirás", y recordarle que, según sus creencias, fue hecho de barro y al morir volverá a la tierra, aún por encima de las riquezas y poder que haya acumulado en este mundo.


El párroco Ángel Solís, en su homilía, señaló que el Miércoles de Ceniza representa el inicio del tiempo de gracia en el que los católicos toman conciencia del sacrificio de Jesús al ser crucificado para el perdón de los pecados del mundo.


La imposición de la ceniza marca el comienzo de una renovación espiritual en todos los creyentes, sostuvo.


Es una época de ayudar a los demás, de ser mejores cada día. Son espacios de reflexión, en los que cada uno asume el sacrificio que quiere hacer para agradar a Dios, indicó.


Versión cristiana


Para la Iglesia cristiana, la Cuaresma no fue observada por la Iglesia del primer siglo, sino por la iglesia de Roma durante el Consejo de Nicea en el año 325 después de Jesucristo, cuando el emperador Constantino oficialmente reconoció a esa iglesia como la religión de estado del Imperio Romano.


El concepto cristiano no es celebrar la Cuaresma, sino practicar lo que nos dejó Jesucristo durante su ministerio.


La misión que tienen, según la perspectiva de la Biblia, es: “Vayan y enseñen a todas las naciones… enseñándoles que guarden todas las cosas que yo (Jesucristo) os he mandado”.