JUCHITÁN, Oaxaca.- Comuneros de San Miguel y Santa María Chimalapa, acordaron con el gobierno federal que 430 mil hectáreas, sean declaradas como Áreas Destinadas Voluntariamente a la Conservación (ADVC), basados en el respeto a los estatutos comunales, usos y costumbres de los recursos naturales y gobernanza.
Desde el mes de julio del año pasado, la federación inició el diálogo con autoridades agrarias de los Bienes Comunales de Santa María y San Miguel Chimalapa para revisar la figura de las Áreas Destinadas Voluntariamente a la Conservación (ADVC).
Se trata de una especie de reserva campesina, similar a la ADVC Cordón El Retén, donde se les permite a los comuneros tener sus propios comités de guardias de vigilancia forestal.
Será durante la primera semana de octubre, cuando se les otorgue el certificado correspondiente, a Santa María Chimalapa por 330 mil hectáreas y el resto a San Miguel Chimalapa.
Controversia con ChiapasPor otro lado, las autoridades comunales revelaron que las 162 mil hectáreas ganadas a Chiapas mediante una Controversia, no serán incluidas, pues aún están a la espera de la definición del Tribunal Agrario, sobre la situación de los ejidos instalados en ese territorio.
Se trata de Áreas Naturales Protegidas con sustento en la Ley General del Equilibrio Ecológico que se determinan por voluntad de los propietarios, así como su administración, definición de la zonificación y estrategia de manejo conforme sus usos y costumbres. Además, definen las áreas multifuncionales, donde desarrollan sus actividades y necesidades productivas.
Asimismo, son certificadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp); el trámite es gratuito y tiene una vigencia de 15 a 99 años.
En esta modalidad de Área Natural Protegida, la voluntad de conservar es expresada por la decisión de la Asamblea comunal y determinan el tiempo a destinar la superficie a proteger, así como la estrategia de manejo y las normas de uso.
