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Sicarios rafaguean a tres ocupantes de una camioneta en Santo Domingo Ingenio

Foto(s): Cortesía
Redacción

SANTO DOMINGO INGENIO, Oaxaca.- Fue una verdadera carnicería. Tres istmeños fueron ejecutados con ráfagas de fusiles de asalto y sus cuerpos quedaron destrozados.


Uno de los ahora occisos ya había sufrido un atentado a balazos apenas el pasado 1 de febrero en el Centro de Juchitán, pero malherido consiguió llegar a una clínica y logró sobrevivir.


Ahora sus verdugos se aseguraron de darle muerte con una lluvia de plomo caliente.


En este nuevo ataque, también murieron dos sujetos que lo acompañaban, por lo que se elevó la cuota de sangre.



El cadáver de Noel Alberto quedó destrozado por las ráfagas de plomo

Se activa la alerta policiaca


Al filo de las 09:30 horas, los cuerpos de emergencia fueran alertados sobre un percance ocurrido en la Carretera Federal 190, en el tramo La Venta-Santo Domingo Ingenio, a la altura del kilómetro 20.


Según el reporte, una camioneta marca Nissan, modelo Frontier, color blanco, tipo doble cabina, se había salido de la carpeta asfáltica.


Elementos de la Policía Municipal de esta población se trasladaron de inmediato al lugar del reporte.


Al arribar al sitio de referencia, los uniformados corroboraron que en efecto la camioneta estaba fuera del camino.


Pero con asombro observaron que en el interior de esta unidad de motor, se encontraban sin vida tres personas del sexo masculino, quienes presentaban múltiples disparos de armas de fuego de alto poder.


Hasta esos momentos se desconocía la identidad de las víctimas.


Ante la matanza, se activó la alerta roja para todas las corporaciones de seguridad.


En minutos, policías municipales y estatales se concentraron en ese punto.



Los sicarios se bajaron de su vehículo para rematar a sus víctimas

También acudieron efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), así como los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), del Grupo Juchitán, y oficiales de la Policía Federal, de la División Caminos.


Una vez blindada y acordonada la escena del triple crimen, se iniciaron las primeras investigaciones del caso.


Se logró establecer que los fallecidos eran el conductor de la camioneta, Noel Alberto C.R., de 40 años; su cuñado Didier A.L., de 21 años, y otro acompañante sólo identificado como Denison N., de unos 24 años. Todos vecinos de la población de Santo Domingo Ingenio.


Según los datos y evidencias recabados, se presume que los homicidas portaban fusiles de asalto AR-15 y se desplazaban en un vehículo, con el cual dieron alcance y se le emparejaron a la camioneta Nissan, doble cabina.


Sin más, los homicidas rafaguearon a los tres malogrados sujetos, por lo que la camioneta Nissan quedó sin control y se salió del camino.


Todavía los sicarios se detuvieron y fueron a rematar a sus víctimas ya fuera de la carretera, para asegurarse que ninguna de ellas pudiera sobrevivir.


Los cadáveres quedaron destrozados, principalmente el de Noel Alberto CR, que se presume fue el blanco principal del atentado.


El fatídico antecedente de la masacre


El pasado 1 de febrero del año en curso, en la calle 2 de Abril, casi esquina con la avenida Efraín R Gómez de la Tercera Sección, en la zona Centro de la ciudad de Juchitán se suscitó una intensa balacera.


En aquella ocasión dos pistoleros atentaron contra la vida del conductor de una camioneta, quien circulaba en compañía de su esposa y su bebé de tan sólo unos meses de nacido.


Ahí resultó herido por disparo de arma de fuego Noel Alberto CR, quien consiguió escapar de sus agresores a bordo de su camioneta y enfilar hacia la calle principal 16 de Septiembre, donde se ubica una clínica particular y en la cual solicitó atención médica de urgencia, por lo que sobrevivió. Su esposa y el bebé resultaron ilesos.


Minutos después la clínica fue blindada por policías municipales y estatales para impedir que la víctima fuera rematada.


También aquella vez uno de los presuntos agresores fue detenido por elementos de la Policía Municipal, quienes le aseguraron un arma corta.


Cuatro meses después Noel Alberto y su cuñado Didier fueron ejecutados, así como una tercera persona, de quien hasta el momento no se tiene su identidad completa.


Inician el legajo de investigación


Los cadáveres de las víctimas fueron asegurados por los agentes estatales de investigación, quienes los trasladarían al anfiteatro local para la autopsia correspondiente y posteriormente serían entregados a sus familiares.


Se ha iniciado un legajo de investigación por el delito de homicidio en contra de quién o quiénes resulten responsables.