TEHUANTEPEC, Oaxaca.- Como cada año, motivados por la fe y la gratitud, ciudadanos que profesan la fe católica y que veneran a la virgen de Juquila se preparan para vivir la festividad en diversas comunidades istmeñas, tras dos años de pausa a raíz de la pandemia de Covid-19.
Se trata de una de las fiestas anuales que reúne a miles de personas en torno a la devoción de una de las imágenes más socorridas por la comunidad católica de Oaxaca y en especial del Istmo.
El 8 de diciembre es el festejo, sin embargo, en varios sitios los festejos inician días antes con rezos y convivencias, no todos pueden acudir al santuario ubicado en Santa Catarina Juquila, pero han adoptado a la virgen en sus pueblos, es el caso de San Miguel Tenango, en la zona chontal alta.
Los habitantes de esa comunidad recurren a la oración ante la imagen mariana cada vez que tienen problemas o para agradecerles sus favores, después del Santo Patrono San Miguel Arcángel.
A diferencia de los dos últimos años, este 2022 se prevé que participe en la fiesta toda la comunidad católica de Tenango. Este será el comienzo de la celebración mayor del 12 de diciembre a otra de las imágenes religiosas más veneradas.
En Tenango empieza el festejo el 6 de diciembre con la tradicional calenda, donde hombres y mujeres vestidos con la ropa tradicional recorrerán las principales calles del pueblo al compas de la música prehispánica, expresa el síndico Tranquilino Mendoza Hernández.
Para el 7 de diciembre, la autoridad municipal contempla la invitación de equipos de basquetbol de otras comunidades para el torneo regional que se disputará en la población.
Mientras se llevan a cabo los encuentros deportivos, los anfitriones realizarán la tradicional labrada de velas, en honor a Virgen de Juquila.
El 8 de diciembre será la levantada de las velas, los invitados disfrutarán de un aperitivo que los mayordomos prepararon para la ocasión dice el funcionario municipal.
Para los habitantes de Tenango, la mayordomía es apreciado por los habitantes, pues, incluso, antes de que el mayordomo actual cumpla su promesa, ya hay quien organizará la fiesta del siguiente año.
