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¡Ni quién ponga orden en el Istmo!

Foto(s): Cortesía
Amando Orozco

JUCHITÁN, Oaxaca.- Los cierres de carretera se han convertido en un fenómeno ya conocido por los pueblos del Istmo de Tehuantepec, y por casi todos los automovilistas y transportistas que suelen transitar por la región.

Además de la pérdida de tiempo que le provocan a la ciudadanía, se tienen también efectos económicos, tanto para los dueños de los autos como para los gobiernos y las diferentes empresas.

El cierre carretero de un grupo de ex trabajadores de una empresa eólica, realizado este lunes, viene a sumarse a la larga lista de bloqueos que se dan de manera frecuente,  provocando la molestia e irritación de la ciudadanía.

“Usamos esta vía de comunicación porque es parte de nuestro trabajo; no es posible que siete personas estén provocando tantas afectaciones”, señaló molesto Jorge Acosta Domínguez, oriundo de Santiago Niltepec.

Agregó que tiene que acudir a la ciudad de Juchitán a realizar varias actividades, como la compra de material y movimientos bancarios que son perentorios, que se ven afectados por la irresponsabilidad de unas cuantas personas.

“De una manera impune, arbitraria e ilegal, estos señores paran la carretera para arreglar un asunto personal que es siete personas, y esas siete personas están afectando a cientos de gentes”.

En ese sentido dijo que se tienen que tomar en cuenta a las personas que nada tienen que ver, a las horas que se pierden y a lo costoso que sale una protesta así.

“Deberían de protestarle a quien deben protestarle y no afectar al resto de la comunidad”.

Solicitó a las instancias correspondientes a que se atiendan este tipo de manifestaciones, principalmente cuando se trata de asuntos entre particulares que afectan a la gran mayoría de las personas, provocando pérdidas económicas y dejando mal a la región.