JUCHITÁN, Oaxaca.- Desde temprano, niñas y jovencitas ataviadas con el traje regional caminaron por las calles de la ciudad visitando la casa de vecinos, conocidos y familiares, vendiendo de forma simbólica “la leche” para obtener fondos para las festividades en honor a San Vicente Ferrer para este año.
El sábado iniciaron las festividades en honor al Santo Patrón de Juchitán organizadas por la sociedad del lado Norte, cuyos socios y socias llevaron a cabo la ceremonia denominada Labrada de Cera, en la casa de los mayordomos de este año.
La ceremonia se desarrolla en torno a la elaboración de los cirios ceremoniales que realiza una persona específica que es contratada para esta labor que dura casi todo el día, pues después de derretir los lingotes de parafina, baña el pabilo anudado a un redondel, una y otra vez hasta obtener el grosor necesario.
Mientras este trabajo de labrar la cera se realiza, las hijas, sobrinas y nietas de las socias acuden a las casas con una bandeja con una jarra de leche, unos vasos y rebanadas de pan para ofrecer simbólicamente a cambio de una cooperación.
Al mediodía, los grupos de mujeres regresan a la casa de los mayordomos para entregar lo recabado ante la mesa de las socias que es presidida por la presidenta, en la cual se hacen las cuentas y se anota cuánto recolectó cada una en una libreta.
Durante la mañana, los integrantes de la sociedad y sus invitados disfrutan de un desayuno tradicional de cerdo horneado y mole.
En la tarde se realiza una pequeña fiesta amenizada por un pequeño conjunto musical; en ella, la presidenta anuncia el monto total de lo recabado por la “venta de la leche” y se anuncia del monto de lo que recabó la familia de cada socio.
La festividad de este día tiene como corolario la repartición de las velas entre los socios.
Luego de una pequeña ceremonia realizada en medio de la fiesta, las velas son colocadas por las socias al pie del santo patrón que preside el altar familiar de los mayordomos.
En mayo, estas velas serán adornadas con flores multicolores y serán repartidas nuevamente entre las muchachas y socias que las transportarán durante el convite de flores hasta los pies del Santo Patrón en la iglesia de Esquipulas, en donde está provisionalmente luego de que el sismo afectara gravemente su templo.
