Lele viajó al Mundial de Qatar sin saber que no tendría boleto de regreso.
Cuatro muñecas creadas por artesanas otomíes pasearon por sitios emblemáticos de este país y estadios mundialistas, pero las dos de mayor tamaño no volverán a su natal Querétaro.
Una de ellas -la de un metro- se extravió, mientras que la más grande -de metro y medio- le dará la bienvenida a todos los que acudan al restaurante Viva México, en la zona de La Perla.
Así comienza una nueva historia para la embajadora de una parte de la cultura mexicana.
"Nuestra Lele más importante fue vista por cientos de miles de personas en el centro -mercado Souq Waqif-, en donde le tomaron fotos y videos. Desde la eliminación de México regresó al Viva México, yo se las doné", dijo Nicola Rustichelli, creador de Webcams México.
El robo de su hermana menor causó conmoción entre la comunidad de mexicanos que acudió al Mundial de Qatar.
Rustichelli fue contactado en varias ocasiones por aquellos que pensaban que la muñeca perdida -¿o robada?- era la que se lucía en Souq Waqif.
Los mexicanos tomaron fotos como evidencia del paradero de Lele y se organizaron en redes sociales para dar con el dueño.
Mientras ellos sufrían con la muñeca, que ahora recibe a los visitantes del restaurante de comida mexicana, la extraviada nunca apareció.
"Ya no la recuperamos, pero era simplemente una de las cuatro que teníamos. Ya dejé Qatar y no nos interesa ya recuperarla o saber su paradero.
"La grande, que era la importante, está en el restaurante Viva México y ahí se quedará", remató Rustichelli.
