La corrupción de las autoridades y la violencia en México inspiró la saga de Call of Duty en Modern Warfare 2, un videojuego que muestra en sus pasajes las ejecuciones y el poder de los cárteles de las drogas.
En uno de los episodios, los protagonistas, los militares internacionales Capitán John Price, "Ghost" y "Soap", se enteran de que un terrorista iraní se esconde en la frontera de México con Estados Unidos.
El juego incluye a dos soldados de las Fuerzas Especiales del Ejército mexicano, el Coronel Alejandro Vargas y su segundo a bordo Rodolfo Parra.
Estos militares narran que quien manda en esa región es el Cártel de Las Almas y que su capo "Sin Nombre" tiene coludidos a sus compañeros del Ejército.
"Como estamos bien entrenados a los soldados nos reclutan los n4rcos...", narra Vargas a los soldados internacionales, mientras viajan en convoy en un pueblo típico de México.
"Niños armas y globos... ¡qué locura!", ironiza uno de los soldados extranjeros.
"El n4rco usa la generosidad para ganarse al pueblo", contesta el Coronel, mientras en el juego se observa a un grupo de personas ejecutadas con unas narcomantas encima.
- ¿Qué pasó ahí?, pregunta uno.
"Narcomant@s... mensajes del Sin Nombre, advertencias, reclamos de territorio, la muerte está en todos lados...", responde.
El convoy evita más adelante un retén del Ejército.
"Hay tropas que maneja El Sin Nombre, como les dije, está en todos lados", lanza el Coronel que en el videojuego encabeza a un grupo que se hace llamar Los Vaqueros.
