María Elizabeth García Cante, jueza federal, consideró ilegal una inspección de un agente de la Fiscalía General de la República (FGR) en la casa de seguridad de los presuntos criminales donde fueron descubiertos distintos explosivos ente ellos C-4 potente sustancia de uso bélico usada por el grupo de "El Marro" y el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para quienes también trabajaban.
García Cnte abrió la puerta de la cárcel para que dos presuntos criminales que fabricaron narcodrones para el cártel de José Antonio Yépez "El Marro" queden libres.
Los drones adaptados con C-4, pretendían ser usados para atacar la Fiscalía de Guanajuato y atentar contra su titular Carlos Zamarripa.
Mediante la investigación realizada por Áreas de inteligencia federal trascendió que en el domicilio en San Pedro Cholula, Puebla, los jóvenes Diego Jiménez Martínez y Rogelio Juan Luna Villa adaptaban los drones.
Fue el tío de Luna Villa, quien reveló que le rentaba el inmueble a su sobrino, quien fue entrevistado por un agente Ministerial.
Durante la revisión que el agente encontró los narco-drones, cartuchos y una serie de insumos explosivos.
Posteriormente, ya con una orden judicial se realizó un cateo en el que fueron decomisados tres drones con explosivos, bolsas y recipientes con pólvora, un fragmento de tubo de cobre C-4 y 99 cartuchos.
Los jóvenes fueron detenidos y llevados a prisión.
Sin embargo, la jueza Marcela Elizabeth García Cante advirtió que la primera inspección fue ilegal por no tener una orden de cateo, y que ella no iba a ser comparsa de "cateos simulados", por lo que anuló 11 de las 13 pruebas que habían sido presentadas, entre ellas todo el arsenal y los detonantes.
Ahora gracias a la decisión de la jueza, sólo Jiménez Martínez será llevado a juicio, pero por posesión de una pistola y 35 cartuchos asegurados en un cateo en otro domicilio.
Hasta el momento Diego Jiménez y Rogelio Villa se encuentran aún detenidos en el penal de San Miguelito, en Puebla.
