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Lamentan suspensión de consulta indígena en Unión Hidalgo, Oaxaca

Foto(s): Cortesía
Redacción

JUCHITÁN, Oaxaca.- Ciudadanos, empresarios y representantes de diferentes sectores productivos del municipio de Unión Hidalgo, aseguran que la mejor manera de revertir las condiciones de marginación que padece la comunidad es a través de la inversión y generación de empleos.


Los altos costos para la producción del sorgo y el ajonjolí, sumado a los bajos precios de los productos, la falta de ingresos de las familias de pescadores, la nula comercialización de la palma y los trabajos mal remunerados de los profesionistas, han impedido el desarrollo de esta comunidad zapoteca.


Ante esta situación, están convencidos que la instalación de parques eólicos, será una de las formas de generar empleos dignos a corto y mediano plazo para los profesionistas y la creación de proyectos productivos para los ganaderos, palmeros, obreros, jóvenes y mujeres que podrán sumarse a la vida productiva con los recursos que aporten las empresas por responsabilidad social, utilidades compartidas, entre otros rubros.


Habrá -dijeron- la oportunidad de crear proyectos de ganadería intensiva, cultivo de peces en criaderos y estanques, profesionistas emprendedores e innovadores en energías renovables, amén de los beneficios que se podrán obtener a través de la consulta.


El interés de la comunidad unidalguence por la construcción del parque eólico Gunáa Sicarú (Mujer Bonita) se basa en la oportunidad de poder cambiar el estatus sociocultural y económico con acelerada activación económica, sin dejar atrás la consulta previa, libre e informada que establecen los estándares internacionales del convenio 169 de la OIT y las leyes mexicanas.


La primera etapa de la consulta indígena convocada el pasado 11 de abril y suspendida temporalmente a raíz de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dictara medidas cautelares, solo es un retraso ante la supuesta existencia de grupos de choque, y hasta guardias blancas, coacción e intimidación, incluso amenazas de muerte que no han existido, expresaron.


Aseguran que no existen tales elementos denunciados por una minoría, pero lo que sí existe es el descontento y la molestia generalizada en la población por la detención temporal del proceso de consulta, pues se está violando los derechos humanos de la comunidad indígena que está exigiendo su derecho a ser consultado.


Exigen que la Secretaría de Energía (Sener) solvente todas las "falacias" que esgrime la CNDH, pues hay evidencias en videos y otros instrumentos para demostrar que hubo civilidad durante los últimos eventos convocados por la Dirección General de Impacto Social y ocupación superficial, en el marco de la consulta indígena.


En ese mismo contexto, demandan la total imparcialidad en el actuar de todas las dependencias gubernamentales, pero sobre todo en los organismos autónomos y de derechos humanos.


Finalmente reclaman que la CNDH respete los derechos humanos del pueblo indígena de Ranchu Gubiña de decidir libremente un proyecto que sabe que impactará positivamente sobre su forma de vida.