JUCHITÁN, Oaxaca.- El Ayuntamiento de Santa María Xadani, que en un principio recibió el apoyo de Carol Antonio Altamirano -diputado federal por el Distrito de Salina Cruz- e incluso le gestionó obras para el municipio, ha develado que los apoyos y gestiones del legislador de Morena tienen precio: el control de las obras.
La disputa por la construcción llevó a los pobladores de Santa María Xadani a cerrar la carretera Transístmica. Encabezados por sus autoridades, este jueves se plantaron en el Canal 33 e impidieron el paso entre Juchitán y Tehuantepec. El financiamiento no aterriza para construir las obras porque la influencia del político, que se ha fugado de los partidos PRI y PRD, lo impide, pues quiere el control de las construcciones para las compañías de su preferencia, indicaron los inconformes.
Desde las nueve de la mañana, como lo habían anunciado en la víspera, los pobladores de Xadani cerraron la vía de comunicación para demandar que los recursos estatales para la pavimentación con concreto hidráulico, que asciende a dos millones de pesos, se concreten.
Para los pobladores “nuestro diputado Carol Antonio Altamirano está interviniendo y él quiere esa obra para ejecutarla y no es posible que un compañero nuestro nos haga esto, los diputados están para bajar los recursos”, dijo Rubisel Santiago Guerra.
El presidente municipal, Hermenegildo Santiago Guerra, reconoció que a principios del año pasado, el citado legislador, inició con las gestiones necesarias ante las instancias correspondientes para que su comunidad fuera beneficiada con recursos para obras de beneficio social.
Pero meses antes de las elecciones el edil fue notificado que el legislador había abandonado las gestiones, para dedicarse a su campaña proselitista.
De manera sorpresiva, en días pasados, el munícipe recibió una llamada telefónica del legislador, en donde le exigió que los recursos sean entregados a una constructora que escogió, para que se encargue de la pavimentación de 80 metros de calles.
Carol se deslinda
El diputado federal, Carol Antonio Altamirano, se deslindó de las acusaciones que las autoridades municipales de Santa María Xadani hacen en su contra, sobre sus supuestas pretensiones de operar los recursos de una obra de pavimentación en esa comunidad.
Aclaró que no es propietario, ni tiene relación con ninguna constructora y que su relación con el municipio de Xadani, ha sido y seguirá siendo de gestiones que generen beneficios para la gente, como legislador que es.
