JUCHITÁN, Oaxaca.- La llegada de las lluvias a la región del Istmo representó para los pobladores de la agencia municipal de Santa María del Mar, tener que utilizar otra vez la ruta marítima para ingresar y salir de su comunidad, arriesgando sus vidas.
Por semanas, los pobladores de esta agencia -localizada en la barra que divide el Golfo de Tehuantepec y la Laguna Inferior- pudieron utilizar el paso Tileme como vía terrestre; incluso fue utilizada por Diconsa para el abasto de productos de consumo básico.
Esto pudo ser posible, debido a la prolongada sequía de casi tres años que afectó a la región y que provocó que el nivel de la laguna bajara considerablemente.
Las lluvias han puesto fin a esta ruta que significaba para los pobladores de Santa María del Mar, una vía segura, con todas las dificultades que representaba la arena, donde continuamente se atascaban las camionetas.
Para el ex agente municipal, Eustacio Reyes Martínez, usar nuevamente las lanchas para poder salir y entrar a la comunidad, significa arriesgar la vida otra vez. Tener que hacerlo con niños o con mujeres embarazadas, significa el doble. “Ora’ si se vino la lluvia muy fuerte y ya no podemos pasar por Tileme, nuevamente nos estamos arriesgando la vida, pero qué podemos hacer, la ayuda del gobierno no llega”.
En enero pasado, los fuertes vientos de la temporada -de más de 100 kilómetros por hora- provocaron la volcadura de una lancha destinada al servicio de la comunidad de Santa María del Mar, donde perdieron la vida tres personas.
Desde hace más de seis años, los habitantes de Santa María del Mar han tenido que salir y entrar por lanchas a través de la laguna, debido a que los pobladores de la comunidad vecina de San Mateo del Mar, bloquearon el único camino que los lleva hasta Salina Cruz.
