JUCHITÁN, Oaxaca.- A poco más de dos semanas para la celebración del Domingo de Ramos, el 2 de abril, las actividades de limpieza y reconstrucción de sepulturas se han intensificado en el panteón municipal, tras dos años de no celebrar este día debido a la pandemia.
En este lugar, ubicado en la Tercera Sección de la ciudad, las familias han estado acudiendo para realizar arreglos a las tumbas, hacerles trabajos de albañilería o pintarlas para que estén listas en esa fecha.
La regidora de Parques y Panteones, Alma Delia Vázquez Salinas dijo que previo a estas festividades, se realizan los trabajos de limpieza y retiro de escombros, y de esta manera garantizar espacios dignos a las familias que acudirán a visitar a sus difuntos.
Señaló que para esa fecha, serán colocadas luminarias en los principales andadores del camposanto y se mantendrán los tanques con agua suficiente para que la gente pueda utilizarla en la limpieza, en el lavado de las tumbas y en sus jarrones de flores.
“Estamos viendo que mucha gente ya está llegando a limpiar y otros más, han mandado albañiles a trabajar. Solo les pedimos que no arrojen la basura ni el escombro en cualquier lugar, para no afectar a otras familias”.
Dijo que para ello, hay espacios donde las autoridades locales se están haciendo cargo de retirar el escombro y toda la basura que se genera en el lugar.
Para la vendimia de ese día, dijo también que ya se planea el operativo para que los comerciantes de los productos típicos, como tamales, regañadas, y otros dulces tradicionales, lo realicen en completo orden.
Sobre las quejas de las familias que han denunciado robos en las sepulturas, sostuvo que redoblarán las acciones de vigilancia, la cual se complica pues el panteón Domingo de Ramos, tiene muchas entradas, pues no cuenta con una barda perimetral.
“De día está el personal dando rondines, y la policía municipal también nos apoya; lamentablemente es durante la noche cuando ingresan personas a vandalizan, pues no hay nadie quien vigile”.
Finalmente aseguró que ya se trabaja en un operativo con la policía municipal, estatal y la Guardia Nacional para garantizar la seguridad de los visitantes y evitar la ocurrencia de hechos delictivos en el camposanto.
