TEHUANTEPEC, Oaxaca.- La iglesia católica se prepara para la Cuaresma. Periodo de 40 días, que los fieles utilizan para la reflexión, el ayuno y la conversión. Este periodo inicia el 14 de febrero con el Miércoles de Ceniza.
De acuerdo con la tradición, la iglesia católica inicia la Cuaresma con el Miércoles de Ceniza, y quien la recibe manifiesta la condición del pecador que confiesa públicamente su culpa, expresa su voluntad interior de conversión, impulsado por la esperanza de que Dios se apiade en su misericordia.
En esta celebración, los fieles inician un tiempo de penitencia como un camino de renovación que culmina en la noche santa con la solemne celebración de la vigilia pascual.
El Obispo de la Ciócesis de Tehuantepec, Crispín Ojeda Márquez, expresa en su homilía que las lecturas que hacen durante la Cuaresma es un llamado a la conversión, al camino de vida y a acompañar a Jesús en su camino al calvario mediante la oración, el ayuno, la penitencia y la limosna.
La liturgia del Miércoles de Ceniza inicia con la preparación de la ceniza, esto es la palma que se ha bendecido según la costumbre católica el Domingo de Ramos del año anterior.
Durante la misa del Miércoles de Ceniza, el sacerdote bendice la ceniza y se impone durante el desarrollo de la liturgia, antes de la comunión del pueblo. Representa el inicio del tiempo de gracia en el que se hace consciencia sobre el sacrifico de Jesús, y para los devotos marca el comienzo de una renovación espiritual.
La imposición de la ceniza sobre la cabeza, representa para los feligreses un gesto de una conversión continúa. Es así como inicia la Cuaresma, los 40 días de preparación para la Pascua que culminará con el Domingo de Ramos.
