JUCHITÁN, Oaxaca.- Presionado por los reclamos de sus gobernados, debido a los últimos acontecimientos derivados del alto número de ciudadanos extranjeros en San Pedro Tapanatepec y los problemas que ha denunciado la comunidad local en torno a los ciudadanos centroamericanos, incluso participación en ilícitos, el presidente municipal Humberto López Parrazales, se encargó de organizar una caravana de migrantes para “desahogar la población”.
Durante la noche del viernes, el morenista llegó al sitio donde pernoctan miles de migrantes, principalmente de origen venezolano, para convocarlos a salir en caravana de esta ciudad del oriente de la región y continuar con su camino hacia la frontera norte, “toda vez que en grupo, no les harán nada”.
Durante las primeras horas del día sábado, la caravana compuesta por más de 300 personas, entre hombres, mujeres y niños de diferentes nacionalidades, salió de la comunidad y fue encabezada por el munícipe tapanero, quien los acompañó hasta pasar por la garita migratoria, instalada a la altura del río Novillero.
Al respecto, dijo que quienes salieron en este primer grupo, son personas que llevaban más de 25 días esperando a que el Instituto Nacional de Migración (INM), les otorgara un permiso temporal para poder transitar por el país, sin ser detenidos por las autoridades migratorias.
Indicó que durante varios kilómetros, la caravana estuvo acompañada por elementos de Protección Civil, Guardia Nacional (GN), policía municipal, para prevenir accidentes, y personal de la clínica móvil y una ambulancia para prestar el servicio médico a quienes los requieran.
López Parrazales destacó que esta acción fue por razones humanitarias, así como una respuesta a la petición de la ciudadanía, que se ha visto afectada por este fenómeno migratorio.
“La gente que está abandonando Tapana es la que ya no tiene recursos; la que se les acabó su dinero y ya no tienen donde dormir y qué comer”.
Finalmente reveló que las caravanas seguirán saliendo de esta comunidad, si las autoridades de Migración no aceleran los trámites para cumplir con la demanda.
Durante la mañana de ayer domingo, trascendió que la caravana de migrantes prácticamente se desintegró antes de llegar a la ciudad de Juchitán; tras haber pernoctado en Santiago Niltepec, donde únicamente llegaron alrededor de cien personas, pues el resto optó por regresar a Tapanatepec y otros más se movieron en camiones de pasaje.
La ciudadanía de Tapanatepec vive desde hace más de un mes una crisis, a raíz de la llegada masiva de ciudadanos extranjeros que buscan un permiso para transitar de manera libre por el país, en su recorrido hacia Estados Unidos. Para Tapanatepec ha significado un problema en diversos aspectos, sobre todo en materia de seguridad pública, pues se han reportado delitos en lo que participan ciudadanos centroamericanos.
