La crisis en el Mar Rojo 'sacudió' las rutas marítimas más transitadas del mundo; por ejemplo, el Canal de Panamá, la segunda ruta marítima artificial más circulada, ha caído un 30 por ciento. Según The Economist, ahora el único 'rival' del canal es el Tren del Istmo.
Además del 'golpazo' generado por los hutíes que atacaron barcos en el Mar Rojo a través del estrecho de Bab al-Mandab, Panamá también enfrenta problemas climáticos: sus lagos se están secando.
Lo anterior ha ocasionado que las conexiones entre el océano Atlántico con el Pacífico -a través del Lago Gatún- estén "a punto de ser demasiado poco profundas para permitir el paso de buques", añade el medio.
Así, gobiernos en América Latina, como México, ya le 'echan ojo' a la competencia, tal es el caso del Corredor Interoceánico de México
"Las alternativas más viables son por tierra, con contenedores descargados de barcos en trenes o camiones en un puerto y transportados a través del país antes de ser recargados en un barco en el otro lado", advierte The Economist.
Gustavo Petro, presidente de Colombia, 'sueña' con construir un ferrocarril para conectar el puerto de Buenaventura en el Pacífico con el Caribe; sin embargo, precisa el medio, hay pocos detalles sobre el proyecto.
"En el lado caribeño no está claro en qué puerto terminará el ferrocarril", añade el diario.
La 'oportunidad de oro'
Con relación a las ideas anteriores, el Corredor Interoceánico sí representa una alternativa por tierra.
Y es que a través de él se crea una plataforma logística multimodal que conecta el Océano Pacífico con el Océano Atlántico, esta plataforma integra los Puertos de Salina Cruz, Coatzacoalcos, Dos Bocas y Puerto Chiapas, de acuerdo con información del Gobierno de México.
De esta forma, la ruta da 'luz verde' al acceso al sur de Estado Unidos, Europa, América y Asia -puntos de enlace entre los océanos Pacífico y Atlántico-.
En ese sentido, el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec cuenta con más de 1 mil 200 kilómetros de líneas férreas, que conectan los estados de Chiapas, Oaxaca, Tabasco y Veracruz.
A través del tren de carga se permite el tránsito interoceánico y la salida de la producción local. ¡Ojo! Incorpora, además, servicios de pasajeros ya que a finales de diciembre de 2023 arrancó la primera etapa del Tren del Istmo para pasajeros.
El Gobierno de México calcula con que el viaje en tren de costa a costa será más rápido que pasar por el canal; no obstante, no considera ciertos aspectos -como capacidad de trenes y velocidad-, significando que el ritmo general de tránsito de mercancías entre los dos océanos será más lento que el del canal.
Así, el rotativo también perfila en la competencia al Corredor Bioceánico de Capricornio: una carretera de doble vía que atraviesa Bolivia, Brasil, Argentina, Paraguay y Chile y que puede ser una alternativa útil para el comercio latinoamericano con Asia. Pero sus 2 mil 250 kilómetros son demasiado largos para competir directamente con el Canal de Panamá.
The Economist agrega que los planes de México con relación al Tren del Istmo también pueden recibir un impulso de deslocalización al "canalizar sus esfuerzos para acortar las cadenas de suministro y alejarlas de China", señala el medio.
