SALINA CRUZ, Oaxaca.- Poco a poco "resucita" la venta de productos relacionados con el Día de Muertos en Salina Cruz. Las calles comienzan a inundarse del olor y colorido de las flores de cempasúchil, frutas de temporada y pan de muerto que comienzan a adquirir los marchantes en las cercanías del mercado central y en plazas comerciales de la ciudad.
Luego de que se suspendieran por dos años las celebraciones de los fieles difuntos, a causa de la pandemia de Covid-19, este año comerciantes comenzaron a ofrecer la mercancía que la comunidad católica busca con recurrencia a fin de preparar las ofrendas para los familiares fallecidos. Durante estas fechas, los marchantes se esmeran para buscar y adquirir las mejores flores, velas, veladoras y frutas.
La señora Piedad, vecina de la colonia Hidalgo Poniente, señaló que por lo pronto acudió al mercado a comprar flor de cempasúchil para sus familiares que ya descansan, pero será hasta el día 29 o 30 de octubre cuando adquiera el pan, las frutas y los dulces, y preparará uno que otro platillo para sus fieles difuntos.
De su lado, la señora Carmen, quien ofrece flores de todo tipo en la entrada lateral del mercado Ignacio Zaragoza, señaló que ha comenzado a traer flor de muerto a su negocio poco a poco. "Se está vendiendo muy bien, esperamos que en los días grandes repunte la venta como en los años anteriores antes de que se presentara la pandemia".
"Aunque nos ganan quienes traen flor de muerto de Tehuantepec o San Blas, creo habrá buena venta para todos, aquí nosotros traemos al negocio y pondremos otro puesto donde nos indique la autoridad municipal, como se le hacía todos los años antes de que llegara la pandemia", agregó la mujer.
La joven Ibis, quien vende frutas en todo el primer cuadro, comentó que ya es la temporada de la naranja, mandarina, manzana, cacahuate, entre otras frutas como la caña, tejocote que dentro de poco también ofrecerá a los marchantes. "Parece que esto se quiere componer, ojalá así sea, a todos nos conviene que haya buenas ventas de toda esta mercancía".
La apertura del panteón municipal es un buen presagio para los comerciantes, pues la gente acude y lleva flores, veladoras, compra cervezas para llevar o la adquiere en las cercanías, dijo Julio Cesar, quien en los últimos tres años perdió a su padre y tío, por lo que ha estado acudiendo con regularidad a llevar presentes a sus muertos.
"Parece que esto se quiere componer, ojalá así sea, a todos nos conviene que haya buenas ventas de toda esta mercancía".
Ibis.
Vendedora.
