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Pese a cancelaciones, eólica continúa proyecto en Unión Hidalgo

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

Gerardo Valdivieso Parada

JUCHITÁN, Oaxaca.- La Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIIDTT) informó que se continúa con la imposición del Proyecto Eólico Gunaa Sicarú de la empresa Électricité de France (EDF) , “que continúa amenazando los Bienes Comunales de Juchitán, así como del amparo agrario interpuesto y la disputa actual por la tierras comunales”.

El proyecto eólico Gunaa Sicarú de la empresa Electricidad de Francia (EDF), a través de su filial Eólica de Oaxaca, tiene un costo de inversión proyectado en 353 millones de dólares.

La Comisión Federal de Electricidad (CFE) canceló tres contratos que tenía con EDF, que son la cobertura de energía, la línea transmisión y el certificado de energía limpia.

En La Ventosa la empresa firmó contrato por apartar la tierra o “por espera” con 46 arrendatarios y en Unión Hidalgo con un poco menos de 150 dueños de tierras.

El proyecto consiste en diseñar, preparar el sitio, construir, operar y mantener la central eólica Gunaa Sicarú con una capacidad total de 300 MW, la cual está integrado por un parque eólico que incluye 115 aerogeneradores de dos alturas diferentes: 80 y 93 metros, uno de las más grandes en América Latina.

Dentro de este proyecto de generación de energía se contemplaba además la construcción de una subestación, una línea de transmisión eléctrica de 230 kV y vialidades internas en un polígono de 79 hectáreas pertenecientes al municipio de Unión Hidalgo y la agencia La Ventosa, perteneciente a Juchitán.

El tipo de aerogenerador contemplado en el proyecto era marca Gamesa modelo G114 con capacidad nominal de 2.625 MW, los 115 aerogeneradores iban a estar instalados sobre plataformas distribuidos en nueve filas irregulares interconectadas entre sí por vialidades internas.

Desde que se supo de la existencia del proyecto no se ha podido concretar posponiéndose a lo largo de cinco años, en las que se trató de implementar una consulta indígena requisito necesario para seguir con cristalización de la central eólica que fue interrumpida por el terremoto de 2017 y luego la pandemia de la Covid-19.