JUCHITÁN, Oaxaca.– Un cocodrilo que durante más de 20 años fue mantenido en cautiverio por las autoridades municipales de San Francisco del Mar, en la zona oriente del Istmo, murió presuntamente debido a la falta de alimento y el maltrato del que fue objeto.
Se trata de “Coco”, un ejemplar de 3 metros de largo, que fue capturado cuando merodeaba en las inmediaciones de la población, para luego ser entregado a las autoridades municipales, quienes acondicionaron una jaula con un estanque en el parque central, para mantenerlo como un “atractivo turístico”.
De acuerdo con algunos pobladores, el cocodrilo murió por falta de atención y maltrato de quienes eran los encargados de su cuidado, y responsabilizan directamente al presidente municipal, Pedro Enríquez Martínez, de este hecho.
Cuando fue capturado, “Coco” no pudo ser trasladado a un espacio donde pudiera seguir viviendo, sin correr el riesgo de ser sacrificado para utilizar su piel y su dentadura.
A pesar de que se buscó la intervención de la Semarnat y la Profepa, nunca se logró hacer el traslado de “Coco” al parque natural Laguna Ventanilla en la Costa oaxaqueña, una zona eco turística con cocodrilos.
Sin más remedio, el reptil se quedó todo ese tiempo en un estanque donde a veces se limpiaba y se le daba de comer; sin embargo, los cuidados no fueron suficientes ni los adecuados, y al final perdió la vida.
Y es que los pobladores aseguran que, en el actual trienio, el reptil no recibió la atención; señalaron que su estanque siempre estuvo sucio, lleno de basura, botes y pestilente lodo, además de que no le daban casi de comer.
“Este trienio fue fatal para él, ya que le tocó ser cuidado por gente sin corazón”, dijeron habitantes de esta comunidad mareña.
