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Migrantes 'dan respiro' a pequeños hoteles de Salina Cruz

Foto(s): Cortesía
Alfonso Tapia Barrita

SALINA CRUZ, Oaxaca.- El arribo de cientos de migrantes provenientes de Nicaragua, Colombia, Venezuela, Honduras, el Salvador y Haití, principalmente, ha dado un respiro a hoteles ubicados en el centro de la ciudad de Salina Cruz, que previo a la temporada vacacional de Semana Santa, confían en que sus ganancias mejoren. 

La falta de inversión en reparación y mantenimiento de parte de propietarios de inmuebles y de distintos hoteles ubicados en el primer cuadro de la ciudad, ha provocado que el puerto se parta en dos: hay un Salina Cruz nuevo, al norte de la ciudad y uno viejo, al sur.

En este último quedan antiguos hoteles que hasta hace unos meses palidecían por falta de usuarios, pero que su situación ha mejorado "un poco" últimamente con el arribo de migrantes que buscan hospedajes baratos, "toda esta gente que deja una amplia derrama económica", dijo Eugenio Campos.

"Si bien sabemos de las dificultades que hay al brindar servicio a gente de otro país, por los malos hábitos que traen algunas personas, como la ingesta de alcohol sin medida alguna, drogas y la mala educación que traen otros, no nos queda de otra que brindar la atención con ciertas precauciones, puesto que desde hace ya dos o tres años, si no es que más, dejamos de tener la totalidad de las habitaciones ocupadas", dijo Manuel, encargado de uno de los hoteles que todavía sobreviven.

Erika, quien es la recepcionista de otro conocido hotel en el corazón de la ciudad, señaló que a este edificio últimamente ha llegado gente de varios países.

"Traen dinero porque sus parientes en el norte les envían para sus gastos, así que utilizan el servicio de hospedaje de éste y otros hoteles que hay en el centro, de 200 a 400 pesos que es el promedio por noche que pueden pagar en términos generales estas personas, así que esto a todos nos conviene".

De su lado, Zayra, quien es recepcionista de otro hotel, señaló que usualmente llegan en grupos estas personas, no solo pagan por el hospedaje de la noche, también piden alimentos que por igual pagan, "así que los más abusados hasta en eso se apresuran a proveer porque genera dinero para bien, a todos nos beneficia, aunque también se tienen que tomar las precauciones necesarias ante tanto robo y asalto que hay en el puerto".