JUCHITÁN, Oaxaca.– Este jueves, cientos de adultos, menores y familias completas que forman parte de la caravana migrante “Éxodo de la pobreza” reanudaron su marcha y avanzaron a pie sobre la carretera federal 190 Panamericana, en dirección a Juchitán, dónde seguirán esperando que las autoridades mexicanas les otorguen visas humanitarias que les permitan llegar hasta la frontera con Estados Unidos, sin ser detenidos.
El grupo, de unas mil 500 personas de diferentes nacionalidades, en su mayoría centroamericanos, venezolanos y cubanos, salieron a temprana hora de Santo Domingo Ingenio, después de haber estado cinco días varados en este municipio de la zona oriente del Istmo, atendidos por las autoridades locales.
Los integrantes de la caravana comenzaron su caminata a las 5 de la mañana y emprendieron su ruta hacia Juchitán de Zaragoza, municipio zapoteca al que arribaron tras haber recorrido poco más de 34 km.
Durante el trayecto, que duró poco más de 7 horas, los integrantes de la caravana no recibieron ningún tipo de apoyo, únicamente la presencia de la Guardia Nacional, elementos del Instituto Nacional de Migración y de la policía estatal, quienes implementaron un operativo para restringir, en algunos tramos carreteros, el tránsito vehícular.
Fue hasta después de las 12 del mediodía de este mismo jueves, cuando los primeros grupos de migrantes comenzaron a llegar a Juchitán, para dirigirse directamente a las instalaciones donde funcionó, desde el 25 de septiembre del 2023 al 3 de enero de este año, el Centro de Movilidad Migratoria.
De acuerdo con el coordinador de la caravana migrante, Luís Rey García Villagrán, el grupo permanecerá por tres o cuatro días en este lugar, donde tratarán de descansar para recuperar fuerzas y luego seguir con su ruta, con dirección a la capital oaxaqueña, a unos 270 km de Juchitán de Zaragoza.
