CIUDAD IXTEPEC, Oaxaca.- Cada año, desde hace 35, Carlos se mete en la piel de Santa Clous y además de regalos, reparte alegría a la niñez de su municipio. De oficio albañil, otras veces camionero y hasta peón, Carlos agarró su misión, ser Papá Noel durante las festividades decembrinas.
En Navidad, él recorre las calles de Ixtepec y regala pequeños detalles a los niños que se le acercan, no hace distinciones. Asegura que los sentimientos, ilusiones, y sueños en cada niño y niña son los mismos.
Comenzó como el único Santa Claus del Istmo de Tehuantepec, comenzó a andar en pie, en otras fue ayudado por personas que se tocaron el corazón y ayudaron a Papá Noel a llegar a más lugares, por lo que visitó en algunos momentos Juchitán, Tehuantepec y Salina Cruz en los años 90.
Debido a ser de bajos recursos, se vio obligado a solo mantener y recorrer desde el 1 de diciembre Ciudad Ixtepec; compra anticipadamente dulces y jueguetes de fayuca, pero no es el regalo, si no la satisfacción de ver en cada niño y niña la sonrisa y emoción de conocer al habitantes bonachón y barrigón del Polo Norte.
Él ha sido en muchas ocasiones el diseñador de su propio traje, y que algunas ocasiones ha sido apoyado por personas caritativas que le ayudan a confeccionarlo, “no es el traje que uno quisiera, pero se acerca al verdadero Papá Noel, asegura.
Su sueño es seguir haciéndolo cada diciembre.
