Mientras Dani Alves firma autógrafos en el centro penitenciario donde está recluido desde el viernes pasado, su esposa Joana Sanz borró todas las fotos donde aparecía con él en su cuenta de Instagram.
Uno de los presos que cumplió una condena por 14 años, al salir mostró una desgastada camiseta del Barcelona con la firma del multicampeón.
"Abrazo con cariño" decía la dedicatoria acompañada por su firma y en emoji de una cara sonriendo.
A la salida de Brians 2, el hombre relató que no estaba en el mismo módulo que Alves, pero no fue difícil hacerle llegar la camiseta para que se la firmara.
Por otra parte, la esposa del brasileño, la modelo Joana Sanz, depuró su cuenta de IG y borró las fotos del ultimo años con el futbolista.
Solo dejó cuatro imágenes que aparentemente están ligadas a algún convenido con patrocinadores.
Sanz inicialmente le dio su apoyo a través de una declaración a Y ahora Sonsoles, pero ahora está en silencio.
"Yo sé quien es mi marido, yo sé cómo lo conocí, yo sé lo respetuoso que es porque ni cuando me estaba conociendo a mi me faltó al respeto. le pido a los medios que no le dediquen más tiempo al tema", dijo en su momento.
Varios medios en España especulan que su matrimonio está acabado.
El plazo para que el nuevo abogado de Alves presente un recurso de apelación para tratar de llevar el proceso fuera de la cárcel, se amplió para dar tiempo al litigante y su equipo de trabajo a armar el escrito y la nueva defensa.
El futbolista es acusado de agredir s3xualmente a una joven la madrugada del 31 de diciembre en la discoteca Sutton.
