JUCHITÁN, Oaxaca.- La gran preocupación de los pueblos sin casos de COVID-19 es permanecer sin casos el mayor tiempo posible, y pese a que les permitieron abrir algunas actividades a partir de este lunes, muchos continuaron con sus medidas extremas para que el virus no llegue de otras poblaciones vecinas con casos positivos.
En San Dionisio del Mar, el Consejo Municipal en coordinación con la Unidad Médica Rural, determinó este fin de semana, continuar por dos semanas más con las medidas de prevención de cuidado personal y comunitarias.
A través de un llamado a los representantes de las Organizaciones Sociales, Ministros de Cultos, encargados de la Iglesia Católica, Directores de Instituciones Educativas, expendedores de bebidas alcohólicas y a la población en general, pidieron continuar con la cuarentena.
Señalan que, debido al incremento de casos de coronavirus en la región del Istmo, que hasta el pasado fin de semana reportó 55 casos confirmados y 11 defunciones, en la población seguirán con la sana distancia, el lavado frecuente de manos y la suspensión de clases en los diferentes niveles educativos.
Además, informaron que seguirá la suspensión de todo tipo de festividades, así como cultos religiosos; la prohibición de ventas de bebidas alcohólicas y realizar convivencias en las playas.
Para quienes regresan de otros estados, deberán quedarse en casa por 14 días, antes de convivir con el resto de la población, hasta descartar la portación del virus.
Quienes presenten síntomas compatibles con COVID-19 (fiebre, tos, dolor de cabeza, dolor de garganta, dolor de articulaciones, dolor de cuerpo, escurrimiento nasal, conjuntivitis, dolor en el pecho o dificultad respiratoria), deberán acudir de manera urgente en la Unidad Médica Rural de la población.
Continuará la inspección y vigilancia en la entrada de la población. De igual forma, desde este lunes 18 de mayo, es obligatorio el uso de cubrebocas para todos los usuarios que viajan de ida y vuelta a diferentes partes de nuestra región del Istmo.
