La mujer afirma que la noche del 31 de diciembre, en la discoteca Sutton de la ciudad catalana, el brasileño de 39 años le hizo tocamientos sin su consentimiento.
Tras tres torneos como timonel, Herrera se va molesto y con rabia al no conseguir un título con el club auriazul, pero tranquilo porque dejó todo en el banquillo.