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A punto de colapsar, viviendas antiguas de Tehuantepec

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

Angel Mendoza

TEHUANTEPEC, Oaxaca.- El colapso de una vivienda antigua, es una advertencia de lo que podría suceder en otros inmuebles históricos de la entidad que datan del siglo XVII, debido a la falta de mantenimiento.

El mayor riesgo está sobre la calla Aldama entre los barrios San Sebastián y San Jacinto, la cual se caracteriza como una de las calles con varias construcciones antiguas entre casas y templos católicos, hay edificios construidos a partir del siglo XVII, incluso de años más atrás.

En la calle Aldama, una de las viviendas antiguas empezó a desprenderse parte de su techumbre de adobe y teja, este problema no sólo se puede presentar en San Jacinto, sino en cualquier parte del primer cuadro de la ciudad.

Ante esta situación, Protección Civil acordonó con cinta el área de riesgo para evitar que la gente pase por el lugar, ya que podría sufrir un accidente, aseguró el subcomisario de la dependencia, Antonio Ríos González.

Dijo que supervisan las áreas donde hay riesgo de colapso a petición de los vecinos que viven cerca de esos lugares, para evitar accidentes.

El historiador local Mario Mecott Francisco, integrante de la asociación civil “Amigos del Centro Histórico”, manifestó que la ciudad como la conocemos actualmente, fue poblada por los zapotecas de los diferentes pueblos del Istmo de Tehuantepec que con el esfuerzo físico levantaron casas de españoles a partir del siglo XVII.

Indicó que en Tehuantepec existen enormes casas con una arquitectura cien por ciento española con columnas, pilares, cornisas y arcos de medio punto, algunos hasta con adoratorios en sus interiores.

Añadió que el municipio siguió conservando su importancia política, militar, administrativa y religiosa desde la época prehispánica hasta la Colonia.

Tehuantepec se caracterizó por ser una comunidad de terratenientes y de opulencia, principalmente a finales de siglo XVIII cuando se activa el comercio a través de la cochinilla, añil y otros.

La economía activa de la época se reflejó con sus grandes residencias, en los templos su ornamentación, así como el traje y vestido de la mujer tehuana, destacó.