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Obras de rehabilitación no detienen la actividad comercial en Juchitán

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

Gerardo Valdivieso Parada

JUCHITÁN, Oaxaca.- Aunque las calles del primer cuadro de la ciudad están en plena rehabilitación y en los dos parques se mantienen los trabajos de modernización, la actividad comercial en el centro no se ha suspendido.
Las marchantes para acudir a los establecimientos comerciales y los puestos de diferentes productos, atraviesan las calles en plena rehabilitación saltándose o pasando bajo delimitaciones de plástico.

Aun cuando en las calles Roque Robles, José F. Gómez, Belisario Domínguez y Juárez no terminan los trabajos de cambio de tuberías de agua potable, drenaje y rehabilitación de pisos y banquetas, hay gente que no las rodea o las atraviesa para llegar más rápido a sus destinos.

Aunque una gran cantidad de puestos ya ocupan las calles 16 de Septiembre, 2 de Abril e Hidalgo, principalmente, sobre la avenida Juárez y el parque Central Benito Juárez todavía hay una gran cantidad de puestos.

En el interior del parque aunque la rehabilitación avanza en un treinta por ciento en su parte sur y en gran porcentaje se ha avanzado en la rehabilitación del quiosco, siguen en el espacio los boleros, algunas vendedoras de ropa típica y vendedores de tacos y otros antojitos.

Sobre la calle anexa al parque, en el lado poniente en la calle José F. Gómez, están ubicadas las fonderas, un reparador de calzado, varias vendedoras de comida como garnacheras y otros comerciantes de artesanías y calzado.

De lado norte están la floreras cuyos puestos de flores abarcan toda la cuadra entre 16 de Septiembre y José F. Gómez además de otros puestos de pan y otros productos, entre el palacio municipal y el parque están una gran cantidad de vendedores ambulantes, desde vendedoras de desayunos, tortillas, hasta frutas y variedad de productos de piratería.

Las tres agrupaciones tradicionales en el centro de la ciudad: fonderas, garncaheras y floreras no han manifestado su decisión de retirarse de sus actuales lugares de venta, aunque la empresa encargada de los trabajos ya las apura para seguir con la rehabilitación.

Aunque a las fonderas se les ha propuesto regresar a su antiguo espacio antes del terremoto del 2017, en la parte sur del palacio municipal, en la llamada zona cero, éstas no quieren regresar a un espacio improvisado sino a un espacio reconstruido para que se queden de forma definitiva.

Mientras tanto, en los puestos reubicados en la calle 16 de Septiembre e Hidalgo ya empiezan a notarse lo que los comerciantes establecidos y vecinos del centro habían denunciado, los dueños de los puestos empezaron a colgarse o a poner los famosos diablitos en la red eléctrica, lo que podría ocasionar incendios, como ha sucedido varias veces en el pasado.