Pasar al contenido principal
x

"Mi agresor continuará llevando su proceso en prisión”, Elena Ríos

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

Citlalli López Velázquez 

La magistrada María de los Ángeles del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca (TSJEO), negó definitivamente el arraigo domiciliario solicitado por Juan Antonio V.C, señalado por feminicidio en grado de tentativa contra María Elena Ríos Ortiz. Con lo anterior el imputado tendrá que permanecer durante todo su proceso en la cárcel.

“Felicito el profesionalismo y estricto apego a derecho de la magistrada María de los Ángeles del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Oaxaca por aplicar la ley con perspectiva de género y por otro lado, le exijo al juez federal Ponciano Velasco Velasco que evite admitir amparos infundados revictimizantes y dilatorios, que actúe conforme a derecho y si no que renuncie”, expresó la también activista María Elena Ríos Ortiz a través de su cuenta en Twitter.

La saxofonista indicó que durante la audiencia no se justificó la excarcelación que en su momento había sido autorizada por el juez de Distrito de Huajuapan de León, Teódulo Pachecho Pacheco, en favor de V.C. bajo argumento de que estaba gravemente enfermo.  

“La resolución se pudo revertir y mi agresor continuará llevando a cabo su proceso en prisión. La magistrada, la M.P., la asesora legal y yo pudimos ver y palpar la conducta agresiva de mi agresor y ahora que no logró su cometido, temo más por mi vida, la de mi familia, la de mi abogada e inclusive por la de la M.P. quien también ha actuado con legalidad”, alertó la afectada.

De este modo, Ríos Ortiz solicitó al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a la Secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, al Fiscal de Oaxaca, Bernardo Rodríguez Alamilla, y al gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, a no dejarla sola.

“Desafortunadamente esta lucha aquí no termina, solamente se ganó una batalla y el proceso legal aún es muy grade (…) No permitamos que el miedo nos doblegue, tenemos que transformarlo en fuerza, fortaleza, en grito, en un llanto que permita que nuestras lagrimas florezcan en nuestras causas justas y legítimas”, expresó finalmente.