JUCHITÁN, OAX.- Representantes del albergue Hermanos en el Camino de Ciudad Ixtepec denunciaron, ante la Comisión de Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), a una funcionaria de la garita del Instituto Nacional de Migración (INM) ubicada en La Ventosa, Juchitán, por violentar los derechos de una niña migrante durante su trayecto por el estado de Oaxaca.
José Alberto Donis Rodríguez, colaborador del refugio fundado por el padre Alejandro Solalinde y defensor de derechos humanos de migrantes, informó que presentó la denuncia ante la CNDH por los hechos que sucedieron los días 30 y 31 de julio en contra de las hondureñas María de Jesús Matute Canales, sus hijas: Keren Jassmin y Katherine Galeas Matute, de 6 y 10 años respectivamente.
De acuerdo a la denuncia, la madre y sus dos hijas, acompañados del padre ingresaron al estado de Oaxaca, pero en los límites con Chiapas fueron asaltados dos veces y el esposo se regresó a Honduras. La madres y las hijas se quedaron a su suerte.
Los asaltos
El primer asalto se registró en el tramo Chahuites-San Pedro Tapanatepec. En este punto los asaltantes fueron identificados por María de Jesús como policías municipales que les quitaron dinero y el celular.
El segundo asalto se dio en el tramo Zanatepec-Niltepec mientras caminaban. En ese trecho, narró, dos personas en bicicletas y armadas les quitaron lo poco que les quedaba; por la noche de ese mismo día, en los límites de Niltepec, dos agentes del INM les cerró el camino, como pudo logró huir de la redada, pero los agentes detuvieron a la menor Katherine.
Después de horas de caminar, María de Jesús llegó hasta el albergue de Ciudad Ixtepec para solicitar ayuda, después de denunciar lo sucedido, Alberto Donis se comunicó con el INM para lograr la entrega de la menor pero la encargada de la garita, Margarita Guadalupe Altamirano Charis, amenazó con retener a la madre también.
Las acciones
“A la funcionaria le hablé del principio de unificación familiar, del bienestar supremo de la infancia contemplado en la Ley para la Protección de los Derechos de los Niños y Adolescentes. Además le expliqué que la familia huía de los maras, pero nada fue suficiente. Le pregunté si María de Jesús podría ver a la niña y respondió que si iba la iban a detener”, indicó el activista.
Ante esa situación pidió la asesoría de la CNDH, además de acompañar a la madre a interponer su denuncia ante la Fiscalía de Atención al Migrante por los asaltos sufridos. Para el día 2 de agosto, María de Jesús se presentó ante la subdelegación del INM en Salina Cruz para comenzar con los tramites de refugiado con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados para ella y sus dos hijas, incluida la menor retenida.
Las vueltas
Ese mismo día, el activista y la hondureña se presentaron en la garita de La Ventosa para ver a la niña, pero nuevamente la funcionaria María Guadalupe Altamirano Charis les negó verla y amenazó con detenerla, pero después de argumentar que se estaba violentando el derecho de las migrantes por muchas razones, entre las que destacaron que son víctimas de delito y en espera de refugio en México por huir de la violencia en su país.
“De manera déspota nos trató, recibió la documentación que llevábamos de la COMAN, después de leerlo nos dijo que la niña ya no estaba allí, que la había deportado y que había hecho los trámites ante el consulado de Honduras, pero me comuniqué con las oficinas del Comisionado del INM y nos dijeron que la niña seguía allí y que nos la iban a entregar”, detalló Alberto Donis.
El albergue de migrantes en Ixtepec denunció que el INM violenta las leyes de migración, pues no respetó el Articulo 112 de la Ley de Migración en su Fracción III, en donde se especifica que no se notificará al consulado si el niño o adolescente pudiera acceder al asilo político o al reconocimiento de la condición de refugiado, lo que no se respetó en esta situación.
Después de dos días, la niña Katherine Galeas Matute le fue entregada a su madre y están resguardadas en el albergue Hermanos en el Camino esperando la respuesta de INM sobre su permanencia en el país.
1
Madre padeció trato déspota.
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Menores esperan respuesta del INM.
