TEHUANTEPEC, Oaxaca.- El llamado a la lucha por la Independencia de México se registró, según la historia, el 16 de septiembre de 1810, y la batalla se prolongó por 11 largos y caóticos años.
Algunos historiadores señalan que los indígenas no tuvieron mayor participación en el proceso, pero otros señalan que fueron precisamente ellos, los auténticos héroes de la Independencia.
El historiador local Mario Mecott Francisco expresa que los pueblos del Istmo de Tehuantepec tuvieron participación en el movimiento armado que encabezó el cura Miguel Hidalgo y Costilla, muchos años antes.
Según Mecott Francisco, en el siglo XVII en el barrio de Santa María, se gestó el movimiento de insurrección indígena de Tehuantepec, Tequisistlán, Nejapa, Villa Alta y otros, para derrocar el gobierno que oprimía al pueblo a consecuencia de la exagerada explotación económica que realizaban con altas contribuciones a las autoridades virreinales.
Incitó a la rebelión la muerte a latigazos del cacique de Tequisistlán. Con el levantamiento de los indígenas chontales y zapotecas de la provincia de Tehuantepec y otros, se rebelaron contra el alcalde mayor Don Juan de Avellán, con tres de sus criados, dos españoles y un negro, un lunes.
Los indígenas del Istmo de Tehuantepec representan una historia de resistencia por más de 150 años que antecedieron a la Independencia, y son considerados en la región como precursores de la movilización nacional, asegura Mario Mecott.
Indicó que fue así como se han presentado durante los siglos XVII y XVIII diferentes rebeliones de indígenas que tuvieron como consecuencia el levantamiento armado del siglo XIX como el inicio de la Independencia de México, la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando Miguel Hidalgo y Costilla realizó el “Grito de Dolores”, para luchar por la patria.
Después de 11 años de lucha, con el ejército Trigarante encabezado por Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, se dio el fin de la guerra de Independencia de México el 27 de septiembre de 1821.
