Pasar al contenido principal
x

Guiengola, Oaxaca sitio sagrado para los tehuanos

Foto(s): Cortesía
Ángel Mendoza

TEHUANTEPEC, Oaxaca.- Guiengola es un sitio mágico; ahí, el pueblo zapoteca creó su fortaleza para defenderse de las invasiones de quienes querían conquistarlos.


El cerro de Guiengola tiene un singular significado para los tehuanos, es un centro ceremonial que destaca en la región istmeña.


El arqueólogo Alexis Sepúlveda Chiñas afirma que el lugar es, para gran parte de la población, sagrado. No solo se hace referencia a él como un espacio histórico, sino que es, en esencia, un sitio sagrado para el pueblo de Tehuantepec.


El especialista rememora que los mixtecos, actualmente Mixtequilla, con quienes crea alianza el pueblo zapoteca, organizaron una caminata al cerro de Guiengola donde se encuentra una singular planta, mismas que al paso del tiempo se convirtió en el adorno principal de la enramada que se coloca para la fiesta titular.


La leyenda cuenta que se trata de un lugar encantado, pues sobre la extensa montaña de rocas y arbustos habitan los Binnidxe, unos duendes, que turban a los visitantes para no encontrar el camino de regreso.


La fortaleza zapoteca es un lugar frecuentado por visitantes de todo el mundo, y se encuentra entre los sitios más importantes del país, aunque a últimas fechas ha prevalecido el abandono.


El arqueólogo indicó que la construcción fue abandonada con la conquista española. Las pirámides se encuentran en la cumbre de una de las montañas.


El núcleo central lo constituyen dos plazas, una más hundida que la otra, con dos pirámides, una al coincidente otra al oriente, un juego de pelota y una residencia tipo palacio.


Se cree que en el cerro de Guiengola hay túneles y pasadizos. Un caso particular se presentó hace seis años, en el que durante los trabajos de extracción de material pétreo de las faldas del cerro de Lieza, se encontró un túnel.


Nadie dio cuenta si era antiguo o reciente, lo único que se sabe es que como éste hay varios, aunque se desconoce dónde podrían ubicarse, ya que fueron cubiertos por los españoles en su estancia por estas tierras.


Algunos historiadores sostienen que los pasadizos fueron hechos en el periodo del rey zapoteca Cosijopi, para proteger a su pueblo de las constantes invasiones de otras culturas. Ellos se autodenominaban binnizá. Evidencia arqueológica indica que su cultura data desde hace dos mil 500 años.


EL APUNTE

La zona arqueológica de Guiengola se localiza al poniente de la ciudad de Tehuantepec, aproxidamente a 14 kilómetros de la cabecera municipal.