SANTA MARÍA EL TULE, Oaxaca.- La máxima danza del estado de Oaxaca fue la ofrenda que decenas de danzantes bailaron en el encuentro denominado Yo soy el ritmo de mi raza, que con motivo de las Fiestas del Árbol del Tule 2018, se vivió en la explanada municipal de esta comunidad de los Valles Centrales.
Por primera vez en este municipio, danzaron vals, schottis, peteneras, mazurcas, pasos dobles, cuadrillas, así como marchas y sones, los bailarines de cuatro municipios: San Bartolo Coyotepec, Villa de Zaachila, La Trinidad y Teotitlán del Valle, quienes fueron invitados a esta celebración por el Comité del Árbol del Tule, el coordinador de las Fiestas del Árbol de Tule y la autoridad municipal.
Nunca antes habían coincidido estas delegaciones bajo la sombra del ahuehuete de más de dos mil años. Danzantes que por promesa bailan sin cansancio durante casi dos horas, para celebrar la vida del árbol más longevo del estado, el Tule.
La música, elemento fraterno de esta danza, estuvo a cargo de los integrantes de la Banda de Música de la Secretaría de Seguridad Pública, que previamente interpretaron Un día en Oaxaca y engalanaron la tarde-noche, en este destino obligado.
El público disfrutó de horas de danza en este encuentro. FOTO: Carina Pérez
Hay que recordar que la Danza de la Pluma representa la conquista del Valle de Anáhuac y los señoríos de Mesoamérica, encabezados por Moctezuma (Motecuzoma Xocoyotzin) a manos de Hernán Cortés, simbolizando el triunfo del catolicismo sobre la cosmogonía zapoteca. Además de ser considerada la joya de las tradiciones oaxaqueñas.
Al finalizar el encuentro, el Jarabe del Valle cerró la celebración, con fuegos artificiales en el cielo y la promesa de los mejores augurios para el ser vivo más longevo del estado, el árbol del Tule.
