Pasar al contenido principal
x

VIDEO| Esposos mueren fulminados por un rayo en la playa

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

MICHOACÁN.- Lo que era una salida vacacional de fin de semana patrio en la playa se convirtió en una pesadilla para un matrimonio originario de León, Guanajuato; la furia de la naturaleza mató también a un comerciante playero.

Tanto la mujer como el vendedor murieron fulminados por un rayo cuando caminaban sobre la arena de la playa de Maruata en Michoacán.

Mario, era un vendedor de hamacas, originario de Guerrero. Aparentemente quiso guarecer su mercancía de la tormenta.

Elvia de Jesús, era vecina de la ciudad de León. Esa tarde nublada junto al mar estaba siendo grabada por otro turista cuando de pronto ocurrió lo inimaginable, ya que un rayo cayó sobre la mujer, alcanzando al comerciante. Ambos murieron en el acto.

Los hechos ocurrieron la tarde del pasado viernes 15 de septiembre.

Elvia de Jesús, de 33 años de edad, había llegado poco antes a la playa de Maruata, en el municipio de Aquila, junto con su esposo Roberto, de 34 años de edad.

Los guanajuatenses aprovecharían las fiestas patrias para turistear y llegaron poco antes de las 9 de la mañana a Maruata.

Incluso ya habían levantado una casa de campaña a unos metros del mar.

Según testimonios, eran las 2:15 de la tarde cuando comenzó a llover y el matrimonio salió del agua ya que el mar se tornaba agitado.

Roberto se adelantó y se refugió en una de las palapas, mientras que su esposa se quedó un poco más para observar el horizonte nublado.

Cuando la lluvia comenzó a arreciar, la joven comenzó a caminar hacia la palapa, y a solamente unos metros de ella, Mario buscaba proteger su mercancía del agua de la precipitación.

 

El rayo cayó de lleno sobre Elvia de Jesús y como si se tratara de una descarga continua pero móvil, alcanzó a Mario.

Los cuerpos calcinados de las víctimas fueron llevados al Servicio Médico Forense del Estado de Michoacán.

De acuerdo con el secretario del Ayuntamiento, Jorge Jiménez Lona, la familia de las víctimas no han solicitado ayuda alguna, pero estarán atentos para cualquier situación que se ofrezca.

Excélsior