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Istmo de Tehuantepec, foco rojo de paludismo por flujo migratorio

Foto(s): Cortesía
Itzel Guizar

Nadia Altamirano Díaz

En medio de las protestas que trabajadores de la Sección 73 del SNTSA mantienen desde hace una semana y que incluyen la suspensión de las labores de nebulización para disminuir la cantidad de moscos que transmiten este y otro tipo de enfermedades, los Servicios de Salud de Oaxaca reconocieron que el Istmo de Tehuantepec, por ser paso de la comunidad migrante, representa un foco de transmisión local en el estado.

Son 16 casos de paludismo que, al corte de la semana epidemiológica número 12, se han confirmado en el estado, pero 15 de estos se centran en el istmo de Tehuantepec en municipios como Ciudad Ixtepec donde se identificaron siete casos, Juchitán de Zaragoza con cuatro, San Pedro Tapanatepec con dos y Santo Domingo Zanatepec con dos.

El otro caso corresponde a la jurisdicción de Valles Centrales, al municipio de Oaxaca de Juárez, pero es considerado como foráneo, término que se utiliza para todo caso confirmado, cuyo origen es un estado del país con transmisión de paludismo, que se detecta en otro estado.

Muy similar al dengue, el paludismo se transmite a las personas por la picadura de hembras infectadas, pero del género Anopheles, quienes pueden infectar con cinco especies de parasitos y de las cuales dos son de las más peligrosas: P. falciparum -el más mortífero y prevalente en el continente africano- y P. vivax -dominante en la mayoría de los países de fuera de África Subsahariana-.

El paludismo es una enfermedad febril aguda que se manifiesta con fiebre, dolor de cabeza y escalofríos que aparecen 10 o 15 días después de la picadura del mosquito infectante.

Cuando los síntomas son leves, se difículta que se reconozcan como un indicador de paludismo.

Cuando el paludismo que se transmite por el parásito P. falciparum no se trata a tiempo puede escalar a un cuadro clínico grave y causar la muerte, en promedio en las siguientes  24 horas.

En Oaxaca en este 2023 no se ha reportado un deceso por paludismo.

Entre las medidas preventivas se recomienda el uso de mosquiteros impregnados con insecticida para disminuir el riesgo de las picaduras de los mosquitos infectados, una acción que la población migrante difícilmente puede realizar porque a su paso por Oaxaca para llegar a Estados Unidos pasan la mayor parte del tiempo en parques o pernoctan a la intemperie.

Los reportes de los Servicios de Salud de Oaxaca indican que dos casos de paludismo se han presentado en menores de cuatro años; igual número en personas de 25 a 29 años y el resto en mayores de 30 y menores de 49 años.