TEHUANTEPEC, Oaxaca.- El sacerdote católico Erick Campos González fue cuestionado por la forma en que se comportó con los Principales salientes de 2023, durante la ceremonia religiosa de entrega de llaves de las iglesias a los nuevos Shuanas de Tehuantepec.
El pasado 1 de enero, los Shuanas salientes cuyas iglesias se encuentran en la zona centro de Tehuantepec, fueron víctimas de presunta discriminación por parte del párroco Erick Campos. El sacerdote eliminó el tradicional protocolo de recibimiento de los Principales que entregaron las llaves de las iglesias a los nuevos Principales que reciben.
De acuerdo, con una denuncia expuesta en las redes sociales, todos los Shuanas que concluyeron su periodo se concentraron en la entrada principal de la catedral en espera de que el sacerdote los recibiera. Y sin mediar una palabra con ellos, empezó a oficiar la misa. Fue entonces que uno de los colaboradores de la iglesia los invitó a pasar, argumentando que no habría recibimiento por parte del sacerdote.
Entraron a la iglesia un tanto sorprendidos, y al llegar al frente no había lugares para ellos ni para los que reciben. Pese a la acción del sacerdote, los Principales salientes se quedaron a escuchar misa y todo el tiempo estuvieron parados.
El sacerdote para justificarse les dijo a lo Shuanas en plena misa que como no entramos antes a misa era decisión de ellos quedarse parados “cuando él fue quien rompió el tradicional recibimiento en la entrada de la iglesia”.
Durante y después de la misa los Shuanas fueron ignorados “ese sacerdote quiere que se le dé uno regalos porque hasta lo insinúa en sus misas diciendo: tal barrio me vistió y cuenta lo que le regalaron (entonces quiere decir que si le damos regalo somos buenos y si no damos ¿no?)".
Los Shuanas exigen al Obispo y autoridades competentes un llamado de atención al sacerdote y párroco Erik Campo y que se abstenga de hacer comentarios que no ha comprobado "y sobre todo que no venga a nuestro querido Tehuantepec a cambiar las costumbres y tradiciones milenarias de nuestro pueblo".
Hace un año, por este mismo mes, como párroco de la iglesia de Santa María, Erick Campos creó una fuerte tensión entre los shuanas y devotos al cancelar la comunión a los feligreses con la excusa de que el vino no era para consagrar y además no es de su marca favorita, el hecho fue denunciado en redes sociales por los shuanas del barrio.
