SALINA CRUZ, Oaxaca.- “Ninguna instrucción de las que usted giró el día que lo vi, ninguna fue respetada, todo me tiene en espera, no tengo respuestas concretas”, expone José Luis Hay Hay en una carta enviada al presidente Andrés Manuel López Obrador y en la que relata la serie de inconvenientes institucionales que ha tenido que sortear en la búsqueda de justicia para su hija Abigail Hay Urrutia, muerta el 19 de agosto del 2022 en los separos de la policía municipal de Salina Cruz.
En octubre pasado, durante una gira de trabajo que el mandatario mexicano realizó en Salina Cruz, José Luis Hay pudo hablar con él y desmenuzar el caso; diligente, López Obrador escuchó al afligido padre y giró instrucciones; cuatro meses después, el padre de Abigail revela que no se ha avanzado lo suficiente y los dos hombres que permanecían detenidos por la omisión cometida contra Abigail, fueron liberados y reintegrados al trabajo municipal.
En su misiva, Hay Hay denuncia “altos acuerdos de impunidad” del presidente municipal de Salina Cruz, Daniel Méndez Sosa e integrantes del Poder Judicial, para cambiar la medida cautelar a Joel Alberto Luis Velásquez y Rafael Ramírez Vásquez, ex juez cívico municipal y comandante de la policía municipal de Salina Cruz al momento de la detención y sometimiento de Abigail Hay Urrutia.
Ambos funcionarios, una vez que fueron liberados, fueron reintegrados a otras áreas del gobierno municipal, “y están gozando de una libertad como si no hubiesen matado a nadie”. Un juez determinó liberarlos debido a que la Fiscalía General de Justicia de Oaxaca (FGJO) no acreditó la responsabilidad, criticó el padre de Abigail.
El entonces Subsecretario de Seguridad Pública del gobierno federal, Ricardo Berdeja, reveló en la conferencia mañanera del presidente López Obrador que ambos funcionarios fueron sujetos a investigación porque “no hubo el deber de cuidado” cuando Abigail Hay fue internada en la cárcel municipal. “Hay presuntos actos delictivos de carácter culposo”, indicó el 25 de agosto del año pasado.
Ahora, a cinco meses y medio de la muerte de Abigail, a cuyo cadáver le fueron practicadas tres necropsias las cuales revelaron asfixia por ahorcamiento como causa de muerte, no hay detenidos ni se ha realizado proceso alguno contra las mujeres policías encargadas de la detención y custodia de la madre de dos pequeños.
Inconformes con falló contra ex concubinoEn tanto, el martes por la tarde el juez Guillermo Martín Martínez determinó vincular a proceso por el delito de violencia familiar a Kleiver “N”, ex pareja de Abigail Hay; sin embargo, no dictó la medida cautelar de prisión preventiva al considerar que la familia de la víctima no corre riesgos por parte del agresor.
El día de la muerte de Abigail Hay Urrutia, Kleiver arribó al domicilio que la joven madre compartía con su padre y sus dos hijos. “Bajo engaños”, narró el abuelo, el imputado sacó del hogar familiar al hijo menor de la pareja, quien desde esa fecha dejó de ver a su familia materna.
SALINA CRUZ, Oaxaca.- La abogada Yéssica Sánchez Maya, de la organización Consorcio Oaxaca, advirtió sobre un “maltrato judicial” que sufre la familia de Abigail Hay Urrutia por parte de integrantes del Poder Judicial de Oaxaca.
En conferencia de prensa, realizada ayer frente al Palacio de Gobierno en la capital del estado, Sánchez Maya expuso que el martes, cuando se celebró la audiencia de término constitucional, el juez que lleva el caso, a pesar de encontrarse en las instalaciones no acudió a la sala de audiencias en donde estuvieron presentes la familia de la víctima, el imputado y su defensa.
La abogada lamentó el desdén del juez Iván Alberto Villalana para no hacerse presente y preferir atender la audiencia de forma virtual. “El internet se caía, la audiencia se paraba, todo ese genera desgaste, él tenía que salir de su oficina y sentarse en la sala de audiencias y eso no quiso hacer… el juez no se presentó y eso es delicado”, abundó.
Sánchez Maya subrayó que en el caso de Abigail Hay persisten “episodios sueltos”, derivado de un trabajo que no ha sido pulcro por parte de los encargados de impartir de justicia. “Los jueces no pueden mirar con claridad lo que significa la violencia contra las mujeres y los impactos en sus familias”.
En tal sentido, la abogada resumió que en el caso de Abigail Hay fueron puestos en libertad los únicos dos detenidos, no han sido judicializadas las policías que detuvieron a la joven mujer, no se considera prisión para su ex pareja pese al riesgo que corre la familia y las implicaciones en la salud emocional del menor que fue sustraído así como en su hermano al vivir la separación.
En tanto, la asesora jurídica de la familia Hay, Dulce María Ramírez, subrayó que con la actitud y determinación del juez Villana “se siguen reproduciendo las afectaciones de un sistema particular que invisibiliza los riesgos de las violencias de género”.
