JUCHITÁN, Oaxaca.- A tres años de que organizaciones civiles interpusieran una demanda de amparo contra la consulta realizada por la Comisión Reguladora de Energía por violar el derecho de la comunidad indígena de Juchitán a una libre, previa e informada, la lucha legal concluyó con la decisión de la última instancia, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que avaló la primera consulta indígena en el país.
Este miércoles, tres ministros contra dos obtuvieron la mayoría que considera que la consulta cumplió con los requisitos legales y desechó los argumentos de las organizaciones civiles que denunciaron una serie de irregularidades en ésta.
Luego de que el juzgado séptimo de distrito con sede en Salina Cruz negara el amparo a principios de este año, el ministro José Ramón Cossío Díaz atrajo el caso para que fuera analizado por la Suprema Corte.
Con lágrimas, Betina Cruz Velásquez, integrante de la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo de Tehuantepec en Defensa de la Tierra y el Territorio, que mantenía un plantón frente al edificio de la máxima instancia de justicia en el país, dijo que la decisión de la SCJN le dio más importancia a la inversión de las empresas, que el valor de los recursos naturales de los pueblos indígenas.
Denunció que los tres magistrados estuvieron a favor del despojo y no respetaron sus derechos ignorándolos como pueblos. Dijo que las consultas son ilegales cuando se realizan como un mero procedimiento a cumplir, luego de planear de antemano las obras de infraestructura como en el caso de Juchitán.
Dijo que acudirán a otra instancia internacional, la última que es la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Dijo que se enfrentarán a la segunda fase de los parques eólicos en la región del Istmo, que planean la construcción de otros 30 centrales eólicas; “allá los esperaremos”, dijo finalmente.
