JUCHITÁN DE ZARAGOZA, Oax.- En memoria de las 36 víctimas mortales que dejó el sismo del hace un año, el Ayuntamiento de esta ciudad, encabezado por la presidenta municipal, Gloria Sánchez López, izará hoy la bandera nacional a media asta, al cumplirse un año del terremoto de 8.2 grados.
En el acto solemne conmemorativo, programado a las 8:30 horas en la explanada sur del Palacio Municipal, la llamada Zona Cero, el Cabildo también colocará una ofrenda floral en honor igualmente de los fallecidos.
Posteriormente, a las 11:49, se realizará un macro simulacro con hipótesis de sismo de 7.5 grados en escuelas, comercios y dependencias públicas, localizadas en la ciudad.
Por la tarde, a las 18 horas, legisladores federales y locales harán un pronunciamiento por la reconstrucción de los pueblos del Istmo de Tehuantepec.
Y a las 19 horas, el obispo emérito de la Diócesis de Tehuantepec, Arturo Lona Reyes, celebrará la eucaristía en memoria de las 36 personas fallecidas por el terremoto.
Tardía reconstrucción
El secretario municipal, Oscar Cruz López informó que durante el evento, la munícipe leerá un discurso donde reconocerá la valentía del pueblo juchiteco para sobreponerse de la tragedia y agradecerá al Ejército Mexicano, a la Marina Armada de México y a otras instituciones de los gobiernos federal y estatal, por la ayuda humanitaria ofrecida a los damnificados.
Aunque, subrayó que también fijará una posición por la tardía reconstrucción de inmuebles, principalmente de viviendas, porque aún muchas familias carecen de un lugar digno.
Explicó que los recursos financieros destinados por el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) a los damnificados, 15 mil y 120 mil pesos para daños parcial y total, respectivamente, resultan insuficientes para reconstruir las viviendas.
Además, observó que cinco mil 200 de las 20 mil 100 familias censadas por la Secretaría de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), aún no reciben la tarjeta del Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi), donde se distribuye la subvención del Fonden.
La destrucción 12 meses atrás
“Todavía no se sabe ni cuándo, ni cuánto van a recibir”, asentó.
Aparte de esto, el funcionario municipal dijo que algunas familias damnificadas han edificado viviendas pequeñas, pero con un estilo arquitectónico distinto al tradicional de Juchitán de Zaragoza.
“Eso está pasando, son pequeñas casas con un cuartito, ¿pero qué se puede hacer con los pocos recursos asignados?”, señaló.
Cadena de calamidades
A su vez, el director de Protección Civil Municipal, José Marín López resaltó que el sismo de 8.2 grados sucedido el año pasado fue una experiencia dolorosa para los juchitecos, porque murieron hermanos y paisanos.
“Fue una tragedia, que llegó después de los fuertes vientos de enero, la posterior sequía, las fuertes lluvias y las inundaciones de junio”, apuntó.
Sin embargo, mencionó que el fenómeno geológico también sirvió para una renovación de la cultura de la prevención personal, familiar y en el trabajo, pero también en la forma de construir.
“Ahora ya hay más conciencia de qué hacer antes, durante y después de un sismo”, indicó.
Mientras tanto, el administrador de la Diócesis de Tehuantepec y párroco de San Vicente Ferrer, Lucio Santiago Santiago destacó que la celebración eucarística abrirá nuevamente la herida en el pueblo juchiteco, debido al dolor causado por la muerte de las víctimas.
“Seguramente se volverá a abrir esa herida que aún no cierra, porque en la cultura de este pueblo, los números, en este caso, un año del terremoto, son importantes para recordar los acontecimientos, tanto en la alegría, como en el dolor”, anotó.
Sin embargo, subrayó que la celebración eucarística también permitirá dar gracias a Dios por seguir aquí y asumir el compromiso a hacer algo aún no realizado en beneficio de los demás.
“Nos ayudará a tomar conciencia y a comprometernos a hacer algo que no hemos hecho por nuestros hermanos”, añadió.
También en Tehuantepec
Por otra parte, el rector de la catedral de Santo Domingo Tehuantepec, Gildardo Aguilar Zárate dijo que la diócesis también conmemorará hoy por la noche el primer aniversario del terremoto con una celebración eucarística en ese recinto y una procesión por las principales calles.
“Es un recordatorio de lo que pasó; es un año de temores, pero también de esperanzas, porque debemos tener confianza en Dios”, asentó.
