JUCHITÁN, Oaxaca.- Para la actual edición de la Guelaguetza, cuyo primer Lunes del Cerro se efectuó ayer, Juchitán y Tehuantepec, cabeza de los dos distritos del Istmo y de los pueblos más representativos de esta región, no participarán.
En el caso de Juchitán, es la segunda vez que no lo dejan participar; en las dos ocasiones fueron por decisiones políticas del gobierno del estado, así lo reveló Mario Mecott Francisco, profesor e historiador tehuano.
Asiduo a la Casa de la Cultura de Juchitán a principios de la década de los ochenta, cuando fungía como presidente municipal, Leopoldo de Gyves de la Cruz, el primer edil coceista, el historiador tehuano recuerda que era parte de delegación que iba a ir a la Guelaguetza.
“Quién lo iba a imaginar, un tehuano en la delegación de Juchitán, ya iba a armar mi maletita cuando nos informaron que, de última hora, se suspendía la participación de Juchitán y que en su lugar iba a ir Ixtepec”.
El profesor recuerda que el entonces director de la Casa de la Cultura, Macario Matus, institución encargada de la delegación, no le dio importancia, a una maniobra meramente política para evitar que el gobierno municipal de izquierda llevara a su delegación a la Guelaguetza.
Para Mario Mecott, la exclusión de las dos delegaciones, que han venido participando desde el primer Lunes del Cerro realizado en 1932, ha sido una decisión política de alguien del gobierno del estado que decide quién va y quién no va, y que han utilizado a los integrantes del Comité de Autenticidad para realizar “el trabajo sucio”.
Aseguró que los zapotecos de Juchitán y Tuehuantepec, a lo largo de las décadas, han hecho grande a la Guelaguetza y no al revés, porque la cultura de ambos pueblos sigue incólume.
Opinó que los integrantes del Comité de Autenticidad no conocen a cabalidad las culturas de los pueblos del Istmo y en base a esa ignorancia han calificado la participación de las delegaciones, dejando pasar en las que sí van a participar grandes omisiones que, dijo, no se mencionará “porque no se trata de rasgarnos entre nosotros”.
En el caso de una delegación que la acusan de llevar más cumbias que sones tradicionales, reviró que el propio Comité de Autenticidad dejó pasar en el pasado “la Pachanga Juchiteca” lo que devino en la incorporación del ritmo en algunas delegaciones.
Dijo que en el caso de Tehuantepec, es la primera vez que no participa en la Guelaguetza, desde el año de 1932, dijo que como director de la Casa de la Cultura recomendó no protestar para ser admitidos nuevamente sino mantener la dignidad de Tehuantepec.
Lamentó que en el caso de Juchitán, el Ayuntamiento juchiteco se haya montado en la delegación de Chicapa de Castro, puesto que originalmente había apoyado a su propia delegación y no haya asumido este desaire que evidentemente tiene tintes políticos de un gobierno estatal priísta hacia dos municipios de oposición.
